Responsables: Barreda, Bono, los consejeros y Novillo
La nefasta herencia de los gobiernos de José Bono, José Mª Barreda y de sus consejeros y consejeras a lo largo de estos años, incluido el viceconsejero Pedro Pablo Novillo, actual agragado de Educación en la Embajada de España en Roma, es indudable. A ellos corresponde reclamar no sólo la deuda política de todos los años de mala gestión al frente de la Junta de Castilla-La Mancha y de su Consejería de Educación, sino el daño moral que han causado a las generaciones presentes y futuras y que la sociedad deberá exigirles más pronto que tarde. Sin embargo, y pese al legado tan desastroso, el señor Barreda se sienta en el Congreso de los Diputados todas las semanas y participa, qué curioso, en las comisiones de Educación como si nada hubiese pasado. De Pedro Pablo Novillo no cabe decir nada. El premio a su gestión está en la consejería de embajada en Roma donde se supone que expiará sus pecados cometidos como viceconsejero en sucesivos gobiernos de Castilla-La Mancha, dejando esta comunidad entre las peores en resultados académicos. Su incompetencia ha quedado acreditada a la vista de los datos que ahora conocemos, aunquen no sea el único responsable. Otros con su silencio o su complicidad también son parte del problema.