Rigau lleva a Inspección a los alumnos que boicotearon las pruebas 4º ESO
La consellera de Enseñanza, Irene Rigau, ha llevado ante la Inspección escolar a los 500 alumnos de varios institutos catalanes que no realizaron las pruebas de 4º de ESO, que se han hecho esta misma semana, en protesta por los recortes en Educación. Rigau ha hecho esta consideración tras asistir en Caldes de Malavella (Girona) a la clausura de las II Jornadas de Educación Emprendedora, en las que han participado unos 300 docentes y equipos directivos de toda España, que han presentado proyectos educativos impulsados gracias al apoyo de las fundaciones Trilema y Príncipe de Girona.
A preguntas de los periodistas, la consellera ha indicado que los 500 alumnos que no hicieron las pruebas de evaluación son "una cuestión técnica" teniendo en cuenta que el total de estudiantes que debían hacerlas era de unos 64.000. No obstante, ha añadido que las pruebas "tenían cierta relevancia" y que los alumnos catalanes tienen el derecho a hacerlas y el deber de participar en todas las actividades de los centros escolares, unas condiciones que no cumplieron los que boicotearon las pruebas de evaluación.
También ha dicho que los centros escolares en los que se produjo el boicot deberán analizar el incumplimiento de los alumnos que no hicieron las pruebas o las dejaron en blanco y las causas del mismo, en función del régimen interior de cada centro, lo que podría dar lugar a sanciones si así se decide en los institutos. Este boicot en contra de los recortes se suma al que se produjo el pasado año, cuando los padres de sexto de Primaria del colegio del Turó del Cargol, de Barcelona, que también se negaron a que sus hijos hicieran la evaluación y no los llevaron al centro.
Son "actitudes equivocadas", ha argumentado la consellera, al valorar que no se quiera hacer las evaluaciones.