fbpx

Los estudiantes españoles fallan más cuando se introduce la variable digital

PISA 2009 evaluó por primera vez la lectura digital dentro de la competencia lectora y PISA 2012 introdujo la competencia matemática por ordenador como opcional, en previsión de que en PISA 2015 todas las competencias se formulen solamente por ordenador.
Diego FranceschMartes, 8 de abril de 2014
0

El pasado 1 de abril, la OCDE presentó los resultados de “resolución de problemas de la vida real” tanto en matemáticas como en lectura por ordenador. Si la media de la OCDE es de 495 puntos, los alumnos españoles obtienen 475 puntos en matemáticas por ordenador.

Si nos vamos a los mejores resultados (niveles 5 y 6), España tiene un 4% de alumnos excelentes, mientras que la media de la OCDE es de un 12%. Los alumnos españoles que tuvieron mejor rendimiento en la prueba en papel superaron en nueve puntos a los que la hicieron por ordenador. En la OCDE esta diferencia es de solo tres puntos.

En cuanto a las diferencias por sexo, en matemáticas por ordenador la ventaja es algo mayor en los chicos respecto a las chicas.

Matemáticas digitales
Y si nos fijamos en la competencia matemática en general, hay una disparidad de resultados dentro del territorio nacional. Navarra obtiene el mejor resultado dentro de España, con 517 puntos, frente a los 461 de Extremadura, que obtiene el peor. El promedio de la OCDE es de 494.

Según José Luis Coronado, profesor y director de Ined21, “tenemos un problema en Matemáticas, un problema que se agrava cuando se introduce la variable digital”.

Según PISA, “aquellos países que preparan mejor a los estudiantes para usar su conocimiento en contextos de la vida real son también aquellos cuyos estudiantes están más a gusto con los procesos cognitivos que son requeridos para resolver problemas complejos de la vida dentro y fuera del centro escolar, como interactuar con dispositivos tecnológicos desconocidos”.

Resolución de problemas
En este sentido, el informe de la OCDE evaluó la competencia denominada “resolución de problemas”. La puntuación media de España se corresponde con el nivel 2 de los seis que establece PISA. Esto quiere decir que un alumno medio español de 15 años es capaz de interpretar en un mapa de carreteras la ruta más corta cuando el tiempo de cada itinerario viene dado; seleccionar cuál es el punto de encuentro para tres personas que viven en lugares diferentes teniendo en cuenta diferentes condicionantes o comprar el billete combinado de metro-autobús y tren más barato en una ciudad desconocida para el alumno, entre otros ejercicios.

En cambio, tendría dificultades para comprar ese billete combinado si surgieran complicaciones como perder uno de los medios de transporte, pagar una penalización, si hubiera retrasos, etc.

Tiene también dificultades para manejar y programar aparatos electrónicos complejos aunque cotidianos como un mp3, un robot aspiradora o el termostato del aire acondicionado o de la calefacción.

Para la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, que presentó los datos de España junto al director adjunto de PISA, Andreas Schleicher, el sistema educativo español necesita “un cambio radical de metodología para que el alumno no memorice únicamente, sino que sea capaz de aplicar los conocimientos a la resolución práctica de tareas complejas”.

Gomendio enfatizó que “es importantísimo que el profesorado lidere el cambio real que tiene que ocurrir en todas las aulas tras el cambio de reglas de juego que va a suponer la Lomce”. Y puso como ejemplo los estándares de aprendizaje y criterios de evaluación que determina el nuevo decreto de currículo de Primaria.

Según Gomendio, “el modelo vigente hasta ahora pone todo el énfasis en el aspecto memorístico del conocimiento y prácticamente ningún esfuerzo en enseñar a resolver problemas complejos, de­sarrollar el pensamiento crítico y creativo, que es lo que valora el mercado”, dijo.

Para la secretaria de Estado, la Lomce va a proporcionar “herramientas –como una mayor autonomía de centros, el liderazgo de los directores y la participación activa de profesores en el currículum– para lograr este objetivo”.

La secretaria de Estado también aludió a la puesta en marcha de una plataforma digital entre el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas para ofrecer cursos de formación a los profesores en competencias pedagógicas innovadoras y la puesta en común de buenas prácticas docentes.

0