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El gasto por alumno en libros ha bajado en 30 euros en cinco años

El precio de los libros de texto se mantiene este curso a pesar de la entrada en vigor de la Lomce. Los editores han preferido no repercutir los costes de la reforma educativa en las familias.
Diego FranceschMartes, 18 de noviembre de 2014
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Los editores siguen insistiendo en reducir el IVA de los libros digitales del 21 al 4%. (Foto: Shutterstock)

El precio de los libros de texto de las empresas pertenecientes a la Asociación Nacional de Editores de Libros de Texto y Material de Enseñanza (Anele), ha experimentado un ligero incremento del 0,8% de media en un curso escolar, el 2014-15, en el que la industria editorial ha tenido que realizar fuertes inversiones para adaptar los manuales a los nuevos currículos de la Lomce. Según los datos del Informe anual de Evolución de los Precios de los Libros de Texto de Anele, este incremento es inferior al registrado en el curso pasado (1,1%).

Por niveles educativos, el incremento medio de los precios de los libros de texto en Educación Infantil ha sido del 0,5%; los de Educación Primaria, del 1%. Mientras, los de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) han registrado un incremento del 0,7%. Por último, los libros destinados a otras Enseñanzas Medias han tenido un incremento del 0,8%. En todos los niveles, los manuales han tenido unos incrementos inferiores a los registrados en el curso pasado.

Es importante recordar que los libros de texto en España están sujetos a dos regímenes de precios distintos: precio fijo o único, que determina el editor, que es aplicable a los libros destinados a Educación Infantil y a las Enseñanzas Medias no obligatorias (Bachillerato y Formación Profesional); y precio libre, y por tanto variable, que establece el detallista para los libros destinados a la Educación Obligatoria (Educación Primaria y ESO).

El Informe Anual de Evolución de los Precios de los Libros de Texto que elabora Anele, el más riguroso de los que se realizan en España sobre la evolución del precio de los libros de texto por la amplitud de la muestra sometida a estudio, destaca que “la evolución negativa del mercado en los últimos años ha significado una notable reducción de la venta total de ejemplares y de compra por parte de los alumnos, lo que tiene una repercusión inmediata en la reducción de las tiradas y, consiguientemente, en el costo por ejemplar, al ser preciso repercutir los costes fijos entre bastantes menos ejemplares”. Hay que destacar, no obstante, que en este contexto de reducción de la facturación, en el presente curso las empresas editoriales españolas han realizado un importante esfuerzo inversor para adaptar los materiales a los nuevos currículos de la Lomce, sin que ello haya supuesto un incremento significativo del precio de los libros de texto. Este curso la Lomce ha comenzado a implantarse en 1º, 3º y 5º de Primaria.

En su informe, los editores de libros educativos vuelven a poner el acento en la importancia que está teniendo en la evolución del gasto real de las familias en libros de texto “la reducción e incluso desaparición” de las ayudas públicas, “lo que puede incidir en un incremento del gasto familiar”. Y más allá de eso, en el gasto medio por alumno que, en cinco años ha pasado de 121,56 euros a 91,15, 30,31 menos, los libros que adquieren los alumnos son un tercio menos que hace cinco años, lo que, a juicio de los editores, “no es ninguna buena noticia para la tan deseada calidad de la Educación. Más si tenemos en cuenta que diversos estudios internacionales han establecido una correlación directa entre la existencia de libros en los hogares y los resultados de los alumnos en evaluaciones como las de PISA”.

En cuanto a la evolución que puede tener el próximo curso, los editores no se atreven a hacer previsiones debido a que se está produciendo una situación hasta ahora desconocida.
“La precipitada y caótica implantación de la Lomce, sin tiempo material para la publicación de los currículos de las comunidades autónomas, ha propiciado una total incertidumbre en el mundo educativo, cuando no la abierta oposición de algunas comunidades a facilitar la implantación de la ley en sus respectivos territorios. Esto ha dado lugar a toda suerte de maniobras para o bien no implantar la ley, o bien retrasar su implantación”, dice el informe.

Los editores constatan que tras anunciar recursos ante los tribunales contra la ley y los reales decretos que la desarrollan, “algunas comunidades no han implantado los nuevos currículos en su territorio y otras sugieren que no los van a hacer y toman medidas que dificultan la implantación, aunque no lo reconozcan abiertamente”. Los editores indican que “varias han optado por una fórmula mágica: la ley se implantará, pero no se podrán cambiar los libros y se mantienen vigentes los anteriores currículos y, así, tantas variaciones como comunidades hay”.

El Informe de Anele apunta que, en este contexto, los editores han tenido que hacer cuantiosas inversiones para preparar libros adecuados a los nuevos currículos del Estado, “currículos difícilmente compatibles por su planteamiento con los hasta ahora vigentes, sin que sepan cuál será el nivel de implantación real de los mismos”.

Ante esta situación, los editores afirman que independientemente de que se esté de acuerdo o no con la ley para poder conseguir los objetivos de ésta, profesores y alumnos han de contar con materiales didácticos y pedagógicos acordes con el nuevo modelo previsto. Además, recuerdan la importancia que tuvieron los libros de texto para la implantación de las leyes anteriores. “Los libros de texto y demás materiales curriculares son el vehículo más eficaz y casi único para que las propuestas de una ley educativa lleguen a todos los profesores, a cuya información e incluso formación contribuyen de manera decisiva.

A través de ellos, los profesores conocen en profundidad los nuevos currículos y las nuevas propuestas didácticas. Eso sin tener en cuenta los cambios que los libros deben ir recogiendo con regularidad”.

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