Los rectores piden un pacto de Estado en la universidad
Así lo planteó el presidente de esta institución, Roberto Fernández, ante la asamblea general celebrada en Valencia, en la que presentó una agenda política de diez puntos, entre los que destacan la exigencia de mayor financiación y el desarrollo de políticas que mejoren la situación del profesorado y del personal de Administración y servicios (PAS).
“No hay futuro en España si no hay un buen futuro para la universidad”, aseguró el también rector de la Universitat de Lleida, quien avanzó que pedirá a los consejos sociales de las universidades, a los empresarios y a los sindicatos “un consenso que reclame al Parlamento poner en primera línea de actuación a la universidad española”.
Agenda Política
La Agencia Política de la CRUE recoge los problemas principales, estructurales y urgentes a los que debe hacer frente la universidad, entre los que se encuentran la exigencia de mayor financiación y el desarrollo de políticas que mejoren la situación actual del profesorado y el PAS.
Fernández se refirió, a preguntas de los periodistas, a la situación de los profesores asociados, cuya problemática, dijo, se extiende a todas las universidades de España y tiene un origen “fundamentalmente económico, derivado de los recortes aplicados por el Gobierno a las universidades”.
Un 40% de asociados
Fernández afirmó que entre el 30 y el 40% de los profesores universitarios son asociados, aunque señaló que dentro de estas personas hay gente que obedece al espíritu de esta figura y otros que no se ajustan tanto, y defendió la necesidad de buscar mecanismos de solución a un problema que, según reconoció, es “complejo”.
“Una democracia de calidad no puede tener una universidad precarizada ni un personal precarizado”, manifestó para alertar también de que la crisis ha provocado que haya profesores que han alcanzado “una excelencia académica” y en cambio viven en “una cierta pobreza económica”, con salarios que “no son de recibo”.
Tasas universitarias
La agenda política de la CRUE también incluye una reducción de las tasas universitarias y un aumento de las becas y ayudas a los estudiantes, y velará por que “no haya un estudiante con capacidad y ganas de estar en la vida académica que se quede fuera por cuestiones económicas”.
Respecto a la mejora de la financiación universitaria, el presidente de la CRUE dijo que “el dinero no lo arregla todo, pero sin dinero se pueden hacer pocas cosas”, y pidió “el establecimiento de criterios mínimos a nivel estatal para asegurar la suficiencia financiera de las universidades públicas”.
Preguntado por la nueva prueba de acceso a la universidad, consideró que es “satisfactoria” y no genera inquietud entre las universidades españolas, ya que mantiene el acuerdo alcanzado con el Ministerio.