"Significativa aunque no catastrófica" bajada de la comprensión lectora de los alumnos catalanes
Aula de un centro de Cataluña durante este curso.
Así consta en la publicación «Quaderns d’Avaluació» (Cuadernos de Evaluación) del Consejo de Evaluación, en la que se recogen y analizan los datos sobre comprensión lectora publicados por PISA en el mes de agosto pasado.
El Consejo señala que las puntuaciones en las ediciones de PISA de 2009, 2012 y 2015 en competencia lectora «se habían mantenido muy estables con valores cercanos a los 500 puntos y con un intervalo de variación de unos escasos 3 puntos». Por tanto, aunque ve «significativa» la bajada de 16 puntos de la última edición de 2018, que se sitúa como media en 484 puntos, no cree que sea «catastrófica». Un dato que subraya la publicación es que el 20,5% del alumnado de Cataluña de 15 años se sitúa en el nivel más bajo de la escala de competencia en comprensión lectora, mientras que los porcentajes más elevados se encuentran en los niveles intermedios, que acumulan el 55,1% del colectivo.
Según el Consejo de Evaluación, el nivel máximo de estudios de los progenitores, en línea con el índice socioeconómico y cultural, «muestran la importancia del capital cultural familiar en el rendimiento en la competencia lectora». Así, señala que entre el alumnado con un nivel alto de dificultad de comprensión lectora, el 9% tiene padres con nivel de estudios superiores, mientras que el 38 % tiene padres con estudios primarios.
Según el Consejo de Evaluación, el nivel máximo de estudios de los progenitores, en línea con el índice socioeconómico y cultural, "muestran la importancia del capital cultural familiar en el rendimiento en la competencia lectora"
Por otra parte, entre los estudiantes con un nivel bajo de dificultad de comprensión lectora, el 16% tiene padres con estudios superiores, mientras que el porcentaje se reduce al 4% entre los alumnos cuyos padres tienen sólo estudios primarios.
Otro de los datos que señala el estudio es el índice superior en comprensión lectora en 23 puntos de los alumnos catalanes que estudian en centros privados o concertados por encima de los que lo hacen en centros públicos. Al respecto, aconseja «no hacer lecturas simplistas de estas diferencias» dado que las divergencias atribuibles a las dos clases de centros «se explican, en gran parte, por la composición social del alumnado, es decir, el alumnado de la escuela privada suele ser alumnado con un índice socioeconómico y cultural más alto».
Otras de la variables son las diferencias de género, que establecen un rendimiento superior en chicas en 40 puntos respecto a los chicos, o el origen, ya que el alumnado nativo obtiene 38 puntos más que el alumnado no nativo en competencia lectora.
De los resultados del informe PISA se desprende que la repetición de curso «no contribuye a la mejora del rendimiento académico del alumnado en lectura, como ocurre en matemáticas o en ciencias», según el informe.