La fuerza integradora de los espacios

Autor: Ángel CRESPO y Óscar CORRAL
Colegio “Sta. María la Real de Huelgas”. Tel.: 983

Cuando un alumno/a no aprende aquello que se le pretende enseñar en la escuela hay dos formas básicas de enfrentarse a esa situación. Una, preguntándose: “¿Qué le pasa a ese alumno? ¿Qué dificultades, limitaciones o deficiencias personales le impiden aprender?”. Otra bien distinta es planteándose: “Lo que he querido enseñarle, ¿se ajusta a sus posibilidades y necesidades? ¿Habría una forma alternativa de organizar y plantear la enseñanza de estos contenidos?”.

A esta segunda perspectiva se presta cada vez más atención por parte de quienes se interesan por una Educación de calidad para todos y es la adoptada por esta experiencia. El Colegio “Santa María La Real de Huelgas” (Valladolid) se incorporó al Programa de Integración Escolar, por decisión del Consejo Escolar, en el curso 1990/91, integrándose en las aulas alumnos con deficiencia mental y otros déficits.

Este proceso fue progresivo; al principio se incluyeron alumnos con estas características en la etapa de Infantil, y conforme pasaban los años, esos niños iban promocionando de curso mientras otros se incorporaban en el centro escolar hasta llegar a nuestros días, en donde hay alumnos con deficiencia mental en todos los niveles del centro: Infantil, Primaria y ESO.

Manos a la obra

Poco a poco veíamos que, tras la Educación Primaria, los alumnos con NEE (Necesidades Educativas Especiales) eran derivados a centros de Educación Especial, medida que no nos parecía adecuada si el motivo del cambio era la dificultad curricular de los niños y no criterios más positivos.

La solución la encontramos en nuestro propio centro, al analizar la adaptación escolar de los alumnos con deficiencia mental en Educación Infantil. En este período educativo se utiliza la metodología de talleres integrales divididos por rincones que permite la adecuación de cada niño al aula.

Nos planteamos la posibilidad de aplicar este método en el aula de apoyo de ESO, pero nos encontramos varias dificultades: la edad de los alumnos (de 14 a 18 años), la escasez de información, las dificultades curriculares de cada asignatura, la aplicación de esta metodología a alumnos con estrategias de aprendizaje limitadas debido a sus patologías (síndrome de Down, microcefalia, asimetría cerebral, déficit de atención, deficiencia mental, etc.).

El objetivo del aula de apoyo es ofrecer la mejor calidad educativa a los alumnos que por sus características personales y/o sociales no son capaces de seguir, en determinadas áreas, el ritmo de sus compañeros y que no responden de forma positiva a las medidas flexibles ofrecidas por los profesores que imparten dichas áreas.
La metodología aplicada en el aula de apoyo con los alumnos con NEE se denomina Taller Integral Dividido por Espacios. Este procedimiento es similar al que se aplica en las aulas de Educación Infantil de nuestro colegio, y que suele desaparecer cuando los niños comienzan Primaria. Se ha aplicado esta metodología en el aula de apoyo a los niños/as con NEE escolarizados en la ESO, adaptándola a la idiosincrasia de este periodo educativo y a las características de nuestro alumnado.

Se propone un aprendizaje: personalizado (partimos de los conocimientos previos del alumno); significativo (el alumno construye sus propios conocimientos, interioriza las experiencias y estrategias que le hacen profundizar y desarrollar sus conocimientos); funcional (utilidad de lo aprendido en situaciones reales de comunicación).

Se ha elegido el término taller integral porque en él se pretenden desarrollar todos los aspectos de la persona: intelectuales, académicos, sociales, motrices, lúdicos, de autocuidado y autonomía personal, etc. En los distintos espacios el alumno realiza el proceso de enseñanza-aprendizaje de una manera activa, primando el trabajo de investigación y experimentación, manipulando y desarrollando su creatividad a partir de la planificación propia de cada espacio.

Centrándonos en el Taller, diremos que uno de los aspectos sobre los que hemos realizado una profunda reflexión a la hora de trabajar por rincones ha sido la cuestión del horario. Se decidió seguir los siguientes criterios para organizar los tiempos del aula: equidad a la hora de tratar los contenidos; coordinación en el uso del material y los espacios; armonía con respecto a las capacidades, necesidades y gustos de los alumnos; y flexibilidad hacia los posibles cambios que surjan.

Así, la finalidad y filosofía de cada espacio es:

–Espacio de destreza manual: iniciar esta actividad como una posibilidad profesional al finalizar su etapa escolar, aplicación de diferentes técnicas plásticas y artesanas, fomentar estas actividades como alternativa al tiempo libre.

–Espacio del ordenador: manejo de este instrumento con unos conocimientos básicos de informática. Utilización del mismo para diferentes juegos educativos y didácticos.

–Espacio de Educación Vial: adquisición de las habilidades necesarias para desplazarse de forma autónoma y adecuada, conocer las normas de circulación y hábitos de comportamiento en el uso de la bicicleta, el transporte público, etc.

–Espacio de mesa: sentados en la alfombra, los alumnos de Infantil realizan lo que se llama la asamblea. Nosotros lo hemos adaptado en este rincón de mesa, donde trabajan los objetivos de las áreas instrumentales. Intervención de los problemas de aprendizaje con el diseño de programas individuales que se trabajarán tanto en mesa como en ordenador.

–Espacio de habilidades de la vida diaria: son conocimientos sobre higiene personal, habilidades sociales, uso de monedas y billetes euros, calendario y reloj, Educación Sexual y afectiva.

–Espacio de idiomas: trabajar el idioma y otro tipo de comunicación diferente a nuestra lengua; adquisición de unos conocimientos y estructuras gramaticales básicas de Inglés.

–Espacio de miniarco: metodología diferente aplicada al cálculo, razonamiento numérico, abstracto, lógico-matemático y estimulación de la atención-concentración. La originalidad de este rincón es el apuntarse a la actividad, ya que ellos son los que llevan la cuenta de resultados, con lo que también se desarrolla la responsabilidad, autorregulación y disciplina.

Pequeños grandes logros

Después de haber llevado a la práctica esta experiencia durante los cinco últimos cursos podemos concluir:

–En el aspecto de la escolarización, el resultado ha sido muy satisfactorio. Con esta experiencia hemos logrado que todos los alumnos con NEE permanezcan en el centro hasta finalizar la escolarización obligatoria y que si algún joven es derivado a un centro específico sea siguiendo un criterio más positivo que la desadaptación.

–En cuanto al nivel académico, hemos constatado un avance muy significativo a la hora de evaluar las adaptaciones curriculares de cada alumno/a después de plasmar los resultados en los boletines de evaluación de cada joven. Sin embargo, hemos observado que aquellos alumnos que presentan algún tipo de dificultad en el área del comportamiento tienen más problemas en adquirir el control necesario para conseguir los conocimientos que se requieren en su adaptación curricular.

–En el plano organizativo se tomaron diferentes medidas. En primer lugar, se trató a estos niños de igual manera en el aspecto físico del aula; en segundo término, cambió la metodología de trabajo, y esto sí ha sido un acierto; por último, se aplicó el principio de utilidad del aprendizaje en el aula de apoyo.

–A nivel de socialización, esta experiencia ha supuesto el enriquecimiento del centro al ofrecer a jóvenes con ciertas dificultades la posibilidad de continuar su escolarización con el resto de sus compañeros, lo que favorece las relaciones personales y sociales.
–El mayor logro ha sido el desarrollo de la autonomía personal. La metodología por espacios ha posibilitado que el chaval trabaje por sí solo, sin la ayuda continua del adulto. También hay que destacar en este aspecto que deja al profesor una independencia de movimientos para ocuparse de aquellos jóvenes que más lo necesiten.

Objetivos del taller de apoyo

El Taller Integral Dividido por Espacios se plantea las siguientes metas:

–Que el joven se considere útil teniendo a su alcance los medios necesarios para lograr metas tangibles y exitosas tanto en su práctica diaria como personal.

–Proporcionar un ambiente escolar que le dé una seguridad afectiva y comunicativa, alejada de bloqueos donde su comunicación oral corra riesgo de crítica o ridículo.
–Elaboración de sus esquemas de conocimiento a través de la actividad constructiva posibilitando nuevos modos de interrelación con el entorno.

–Considerar la intervención pedagógica como un ajuste entre el grado de ayuda y las necesidades características de los alumnos para su mediación, socialización y aprendizaje.
–Despertar la capacidad de aprender de los chavales con NEE a través de su motivación, flexibilidad de grupos y estilos de aprendizaje de cada alumno.

–Trabajar sus diferentes realidades y diversos intereses con una metodología diferente, a través de materiales distintos y acordes al aprendizaje significativo que marca la LOGSE.

–Minimizar los aspectos negativos que comporta el agrupamiento flexible por edad cronológica, poniendo en práctica dos mecanismos del tipo de Educar en Valores: respetar las diferencias individuales de ritmo de aprendizaje y buscar estrategias didácticas alternativas.