Las aulas claman por una revolución

La Educación no puede quedarse atrás. Nuestra sociedad evoluciona de modo constante y el mundo formativo debe estar a la altura de las circunstancias. Más aún: ha de adelantarse a los cambios para que su labor sea realmente efectiva y útil.

Esta carrera entre Educación y sociedad no suele estar igualada. Por ello, la Fundación Santa María ha celebrado en Madrid un congreso este mes de abril en el que han participado los actores del proceso educativo. Han compartido sus perspectivas y aportado las soluciones que han ido abrazando para afrontar la adaptación de la Educación a la realidad social que hoy nos condiciona: la sociedad del conocimiento.

Participación activa

La peculiaridad de este congreso ha sido que los participantes han tenido un papel activo: no se han limitado a escuchar, sino que ellos mismos han pronunciado las distintas ponencias. Los temas tratados se han agrupado en cuatro sesiones, cada una de ellas compuesta por varias ponencias. Los grandes temas tratados han sido “La familia, agente de Educación”; “La institución escolar como centro de cambio”; “La formación de los educadores”; y “La Educación a lo largo de la vida”.

En el congreso han participado expertos del mundo educativo, tales como Emilia Dowling, de la clínica Tavistock de Londres; Virginia Cagigal, de la Universidad Pontificia de Comillas; Juana María Sancho y Fernando Hernández, ambos de la Universidad de Barcelona; Aurelio Villa, de la Universidad de Deusto; Carlos Marcelo García, de la Universidad de Sevilla; Florentino Sanza, de la Universidad Nacional de Educación a Distancia; y Juan Antonio Ortega y Díaz-Ambrona, ex ministro de Educación y Ciencia y ex presidente de la Comisión para el Estudio de las Humanidades.

Una de las ponencias más destacadas ha sido la protagonizada por los principales actores de la Educación: los alumnos. En la ponencia Soñar el centro que queremos, los estudiantes del IES “Santa María del Pilar”, de Zaragoza, han sido quienes se han preguntado qué cambiarían de su centro de estudios y del sistema educativo en sí mismo. Para elaborar la propuesta definitiva se han valido de la evaluación global que los alumnos de 2º de Bachillerato del centro realizaron de su paso por las aulas. A partir de las opiniones recabadas, los alumnos redactaron las conclusiones que han sido expuestas en el congreso.

Deseos para la calidad

Para los estudiantes lo que dota de calidad a un centro es la Educación en la libertad y la responsabilidad, la capacidad de “volar solos”. Por otra parte, también les resulta importante la constante mejora y adaptación de las instalaciones, la apertura a las TIC, los intercambios con alumnos de otros países, el clima de respeto y libertad entre profesor y alumno, la cercanía y paciencia de los docentes, que éstos sean capaces de transmitir entusiasmo por su asignatura y sean personas apasionadas con su profesión, buenos comunicadores, con ganas de enseñar y que se preocupen académica y personalmente por sus alumnos.

En cuanto a la formación de los educadores se puso hincapié en los nuevos retos a los que se enfrentan.

Federico Mayor Zaragoza, presidente de la Fundación Cultura para la Paz: “Debemos educar a ciudadanos del mundo, participativos y críticos”

En la conferencia inaugural del congreso sobre “Una Nueva Educación para una Nueva Sociedad”, el ex director general de la Unesco, Federico Mayor Zaragoza, destacó que la sociedad mundial está polarizada. “En la Aldea Global que sugirió McLuhan existe un barrio formado por el 17% de la Humanidad y que posee el 83% de los recursos, incluido el conocimiento. Deberíamos tener problemas de conciencia para conciliar el sueño al saber que 30.000 personas mueren diariamente de hambre en el mundo. Estas condiciones son intolerables y provocan una tensión que no es buena para nadie. Y si pretendemos que la nueva Educación forme a los ciudadanos del mundo, debemos hacerles conscientes de esta fractura”.

Mayor Zaragoza afirmó que es necesaria una nueva sociedad, éticamente exigible, que “sólo será posible a través de la Educación, la formación y la información. La buena Educación debe perseguir la formación de ciudadanos del mundo, participativos y críticos”.