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Luces y sombras en la Formación en Centros de Trabajo de la FP

La Formación Profesional está de moda. Así lo demuestran los datos de Ministerio de Educación. Según sus estimaciones, en el curso 2002-03, 449.624 alumnos se matricularon en los Ciclos Formativos, 222.050 en los de Grado Medio y 227.574 en los de Grado Superior.
Miércoles, 11 de junio de 2003
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Una de las razones que puede explicar estas cifras es la realización de prácticas en empresas, la Formación en los Centros de Trabajo (FCT). Al realizarse en un lugar de trabajo, los alumnos tienen la posibilidad de desempeñar las funciones propias de su profesión en condiciones reales. Además, supone una buena oportunidad para insertarse en el mercado laboral. De hecho, según los datos del MECD, seis meses de después de finalizar su formación, el 63% de los alumnos encuentra trabajo, más de la mitad de ellos en la misma empresa en la que realizaron la FCT. Las empresas también obtienen beneficios ya que reciben un subvención por cada alumno que forman.

Sin embargo, no todo son ventajas. Algunos alumnos se quejan de que las empresas les utilizan como mano de obra gratis y de que en ocasiones realizan actividades que no tienen nada que ver con lo que están estudiando. También se han dado casos de estudiantes que realizaban horas extras remuneradas, práctica prohibida por la ley, o salían de la localidad en la que recibían su formación, por lo que en caso de accidente el seguro escolar no correría con los gastos.

Raúl León Blanco estudió Comercio y Marketing en el IES “Teide IV”. La FCT la realizó en la empresa Grupo Inversión Global Markets y tras concluirla siguió trabajando allí. Según él, “la empresa exprimió a los alumnos todo lo que pudo”. Cuando llegó a la compañía, junto con otros 14 alumnos, ésta contaba sólo con 7 empleados. “Los alumnos levantamos la empresa. –dice Raúl– Utilizaban a los alumnos para crear nuevos departamentos. Si no funcionaban se cerraban y se creaban otros. La empresa no perdía dinero al no pagar a los alumnos”. Sin embargo, Raúl considera muy positiva su experiencia. “Nos dio la oportunidad de crear algo muy nuestro”.

También se queja de que la formación que recibió en clase no sirvió de nada cuando llegó a la compañía. “Me dio la impresión de ir de cero. Más que a poner tus conocimientos en prácticas, llegas para aprender”.

Otra de las cosas de las que se queja es del elevado número de alumnos. “Éramos tantos que no teníamos ni espacio ni medios para desarrollar nuestra formación. La empresa amasaba becarios por amasar”. A pesar de esto, considera positiva la realización de prácticas: “Es una buena oportunidad para incorporarse en el mercado laboral y conocer como funciona una empresa”. Por último afirma que durante su formación nunca le hicieron sentirse como un becario.

Antonio Vázquez Perón es estudiante de Automoción y está realizando la FCT en Mosamadrid. Eligió cursar los Ciclos Formativos “por la posibilidad de realizar prácticas en empresas”. Considera que la FCT es fundamental para una buena formación, ya que “en un día aprendes lo que en un año en clase”. Cree que la FCT “se debería remunerar, aunque de manera simbólica y para motivar al alumno. Pero también hay que tener en cuenta que te dan la posibilidad de aprender”.

En este curso, alrededor de 130.000 alumnos están realizando la FCT en más de 60.000 empresas, el 95% de las cuáles son PYMES. Además de en pequeñas empresas, los alumnos también tienen la posibilidad de realizar prácticas en grandes multinacionales como BMV, o en grandes compañías españolas como El Corte Inglés.  

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