fbpx

Barcos de papel animados

He aquí un taller de cine de animación para pequeños de tan sólo cinco años. El resultado, “Barcos de papel”, una bonita película basada en la técnica de recortes.
Miércoles, 4 de febrero de 2004
0

Realizada por 23 niños de cinco años de la asturiana EI “El Llano”, Barcos de papel es una película de animación desarrollada con la técnica de recortes y elegida como beneficiaria en la convocatoria de Ayudas a la Creación e Investigación en Vídeo de la Fundación Municipal de Cultura, Educación y Universidad Popular del Ayuntamiento de Gijón.

Se trata de ayudar a desarrollar el potencial intelectual que el pequeño hereda de sus padres a través de la Estimulación Temprana y gracias al taller de imagen. La película es una carta audiovisual que tiene como objetivo la iniciación y utilización del lenguaje cinematográfico y de cine de animación.

Correspondencia escolar

El film es, además, un modelo de correspondencia escolar. De este modo, los niños pueden hacer amiguitos nuevos en As Pontes (La Coruña), Gijón y en el mundo entero gracias a Internet, ya que a través de la Red se envía la película.
Una película que trata de establecer un curriculum abierto a las necesidades de una sociedad en proceso de transformación, en la que se están incorporando grandes avances tecnológicos, como la imagen en la escuela.

Las Nuevas Tecnologías tienen que ponerse al servicio de la sensibilidad y de la cultura, y su estudio puede convertirse en un instrumento de renovación pedagógica. Así, esta experiencia pretende ser un servicio a la expresión en un panorama más comunicativo.

Para ello, se han tenido presentes una serie de objetivos basados en formar niños:
—alfabetizados en la imagen;
—críticos frente a los medios;
—receptores participativos.
—capaces de dar respuesta a los mensajes que reciben masivamente;
—emisores de sus propios mensajes audiovisuales, que les van a permitir comunicarse mejor con otras personas o con su entorno.

Pasos a seguir

Para llevar a cabo el proyecto se siguieron estos pasos:

—Los niños sintieron la necesidad de tener amigos nuevos de otros colegios. Sobre todo, querían conocer a niños de As Pontes porque su profesora se había pasado 24 años allí.

—Pensamos entre todos crear una “carta-mensaje” para enviarla a los niños de As Pontes y luego a todos los colegios de Gijón. Esto nos llevó casi un mes. Al final, un día leímos en un libro de la biblioteca de aula Barcos de papel de Tagore. Nos gustó tanto que nos inspiramos en él para hacer nuestro cuento. Por fin todos nos pusimos de acuerdo en que ésta sería nuestra película, pues ya sólo el título nos encantaba. Desde entonces empezamos a trabajar.

—A los niños cada vez les entusiasmaba más la idea de hacer su primera película de cine de animación: Barcos de papel. Habían visto muchas películas realizadas por otros niños y hasta las familias estaban metidas de lleno en que sus peques fueran a hacer su primera película.

—Así que empezamos: Primero, trabajamos el texto como una actividad de animación a la lectura, por medio de dibujos. Fue una buena motivación para el aprendizaje lecto-escritor.

—Fuimos creando el story-board. Trabajábamos el texto y las frases, y explicábamos las clases de encuadres y planos que existen. Los pequeños dibujaban esos planos y, cuando ya los tenían hechos (todos hacían la misma secuencia), democráticamente elegían las que más les gustaba para aparecer en nuestro story-board. No se daban cuenta pero hacían grandes progresos en su alfabetización en el mundo de la imagen. Sus dibujos ya eran más significativos y plasmaban muy bien el mensaje que querían trasmitir.

—Luego comenzamos la experiencia de Juego con mi fotografía y mi cámara mágica. Hicieron con cajas de cartón su cámara, la pintaron con témperas, la decoraron con gomets, las personalizaron con un dibujo de su esquema corporal y así hicieron sus primeras fotografías. Pensamos cómo ibamos a crear nuestros cuerpos para que los nuevos amigos nos conocieran. Surgieron muchas ideas, pero la que más gustó fue la de añadir un cuerpo imaginario a la fotografía de nuestra cabeza. Así, salieron muñecos muy divertidos, tantos como niños aparecían en la película jugando por el mural del patio del colegio, dando lugar a unos segundos de animación.

—Nos faltaba aprender a hacer los barcos de papel. Involucramos a la familia y hoy ya somos grandes expertos.

—Preparamos los decorados. Decidimos hacer dos para realizar las animaciones de la película: el patio del colegio y un gran río (por el que navegarían los barcos de papel). Utilizamos témperas, esponjas, pinceles y papel continuo.

—Para la banda sonora de la película, se utilizó el CD de Clásicos populares infantiles.

—Hicimos una mascota de la película: un gran barco de polispán.

—Ya teníamos todo, pero nos faltaba poder dar vida al mensaje. Tras concedernos la ayuda el Ayuntamiento de Gijón, los niños de la clase de cinco años íbamos a hacer una película de dibujos animados. Para ello, contamos con la ayuda de José Antonio M. Morala, el técnico de vídeo que nos vino a grabar en la cámara. Todos hicimos de actores siguiendo el orden del story-board.

La metodología ha sido objetiva, intuitiva, activa, dinámica y ha facilitado la integración en sus tres aspectos de comunicación, colaboración y responsabilidad.

Mª Teresa SANTIAGO
EI“El Llano” (Gijónl) 

0
Comentarios