Apprece demanda un verdadero “Pacto Escolar”

Las Apprece Autonómicas han expresado su confianza en que pronto se logre un verdadero pacto escolar que, entre otras cosas, permita elevar la calidad de la enseñanza de las religiones en la escuela y de la dignificación profesional y laboral del profesorado que las imparte. Este mensaje ha sido emitido durante la 34 Asamblea General Ordinaria de las Apprece Autonómicas realizada en la ciudad de Valencia el pasado 12 de marzo.

«Todos los que se sientan de verdad demócratas van a hacer posible el Pacto Escolar que hace falta en España», mencionan en el documento donde también señalan que con esto podrán dedicar sus energías en la mejora de la calidad educativa de todo el sistema.

Asimismo, lamentan la forma en la que ha discurrido el debate previo a la formulación del Proyecto de Ley que reforma la Ley de Calidad en vigor, puesto que consideran que, en lugar de lograr puntos de encuentro, la impresión es que se ha ahondado en la confrontación y en el distanciamiento entre unos y otros. Apuntan que “algunos quieren imponer un único modelo educativo y esta forma de proceder no la consideramos un progreso social, porque todo centro educativo tiene que ser abierto y plural”.

Advierten que admitirán las garantías dadas para seguir impartiendo las enseñanzas de la religión en la escuela pública si se las considera como cualquier otra área fundamental del currículo, en la que los conocimientos, los procedimientos y las actitudes sean evaluables y computables a todos los efectos académicos.

En ese sentido, recuerdan que Apprece y la Unión Apprece España han aportado propuestas que respetan los Tratados Internacionales, las Constituciones Española y Europea, los acuerdos firmados entre la Iglesia y el Estado, los convenios con otras confesiones y los procesos de reforma del sistema educativo.

De igual modo, expresan que, mientras en Francia se ha aprobado que en la escuela pública se enseñe la historia de las religiones, en España “algunos quieran volver a experiencias decimonónicas, que sólo conducen a la ignorancia del ser humano sobre el hecho ineludible de la presencia de la religión en todas las civilizaciones y culturas». Añaden que se pretende ignorar que la enseñanza de la religión contribuye al conocimiento de las creencias, tradiciones y culturas de los demás, a la convivencia pacífica y al diálogo intercultural.

A favor de los profesores

Los miembros de la Apprece consideran como inviable e incoherente la postura de quienes, dentro de la comunidad cristiana, sólo se preocupan de la asignatura de Religión, olvidándose del profesorado que las imparte sin tener en cuenta sus derechos y, al mismo tiempo, a quienes pretenden acabar con la presencia de la enseñanza religiosa en la escuela pública y que luego aseguran que defienden los derechos de su profesorado.

En particular, expresan su indignación ante la propuesta y votación en el Consejo Escolar del Estado de que el grupo profesional con titulación universitaria que imparte la enseñanza confesional católica no forme parte de los claustros. «Semejante despropósito seguro que no se ha dado nunca en la historia del sindicalismo. ¿Cómo se pueden llamar representantes de los trabajadores quienes proponen el recorte de sus derechos, lo votan o se abstienen en lugar de defenderlos?», cuestionan.