"En los casos de violencia, hay que salir apoyando al centro: después ya veremos"

Usted ha pedido al Estado que se revise la financiación de Baleares. ¿Por qué?
Porque es verdaderamente escandaloso ver que hay comunidades como ésta, que ha crecido 14 o 15 puntos en población escolar en los últimos diez años, frente a otras que han perdido 35 puntos. Y sin embargo, desde 1998, no ha existido un cambio del sistema de financiación. Yo no puedo decir que le quiten el dinero a Asturias porque ha perdido el 30% de sus alumnos, pero sería lógico que el dinero fuera con el alumno. Y los han perdido en gran parte porque se han ido a otros sitios como a Baleares. En los últimos años no sólo han venido alemanes o marroquíes, muchos han venido de Asturias.

Mirando los índices educativos vemos que Baleares tiene los problemas propios de la regiones prósperas. Por ejemplo, tiene un alto índice de abandono temprano porque los jóvenes pueden encontrar trabajo con facilidad, ¿qué se puede hacer al respecto?
Es cierto, aquí es fácil emplearse y encontrar trabajo bien remunerado, de modo que es una tentación. Otro factor peculiar que dificulta el proceso educativo es la diversidad de la población. Aquí tenemos gente de 120 países distintos y es la comunidad que más extranjeros tiene en sus aulas, con más de un 11%. Esto no quiere decir que los que vienen de fuera sean menos listos que los de aquí, pero qué duda cabe que el arraigo en una sociedad tiene que ver con el proceso educativo.

¿Qué se puede hacer para convencer a un chaval de que no abandone sus estudios por ganar mil euros?
El problema no está en que el alumno no vea –al fin y al cabo son jóvenes– que optando por ese trabajo y ese dinero fácil está tocando su techo de cualificación y que ya nunca va a tener la oportunidad de mejorar su formación. Es clave que sean las familias las que valoren la importancia de que terminen sus estudios. Esto significa con frecuencia sacrificios económicos, porque hay que mantener una persona más en casa que está estudiando y que quizás podría aportar un dinero. Los padres tienen que entender que ese sacrificio es muy bueno para el futuro de sus hijos.

¿Qué le parece la Educación para la Ciudadanía?
Es un error introducir esta asignatura de la que no me gusta ni el nombre. Pienso que no debe haber una asignatura que se dedique a educar para la ciudadanía sino que esa tarea debe acometerse en cualquier momento en el que se haya que advertir que no hay molestar a un compañero, que la igualdad es un valor, etc.

¿Por qué quieren introducir esta nueva materia que es tan cuestionada y ponen trabas a la Religión que eligen el 70% de los padres?
Esta es la sociedad en la que nos quieren hacer vivir. Pero la sociedad civil es de otra manera, porque si uno coge las estadísticas el porcentaje de padres que elige Religión, en efecto, es desbordante. Y esto es un hecho. A la mayoría de la gente esa base de humanismo cristiano le parece positiva porque encierra valores muy relevantes.

Tolerancia cero contra la violencia escolar

¿Cómo va ese Observatorio de la Violencia Escolar?
A mí me gusta llamarlo más bien Observatorio de la Convivencia porque es mucha más la convivencia que la violencia. El Observatorio se creó con carácter preventivo porque para reprimir las conductas ya existe la inspección y los propios centros tienen autonomía para sancionar. Hemos aprobado un decreto de convivencia que, entre otras cosas, obliga a todos los centros a elaborar durante este curso su plan de convivencia escolar, a nombrar a su coordinador de convivencia y a involucren a padres, profesores, personal administrativo, alumnos… En este proceso no puede haber tolerancia, no puede haber desinterés, no se puede mirar hacia otro lado en el patio cuando se observa una situación de violencia: hay que intervenir.