Los alumnos de diferenciada rinden más sin que importe su nivel social

Quiso la casualidad, o no, que el país número uno en PISA tenga una amplia cantidad de alumnado en escuelas diferenciadas. Pero lo que atrajo a los investigadores de la Universidad de Pennsylvania a indagar en los colegios de Seúl no fue su liderazgo, sino la distribución aleatoria de los estudiantes en colegios mixtos o de un solo sexo.

En la capital coreana, los alumnos que van escuelas masculinas y femeninas ni lo han elegido ni han sido elegidos por aquéllas, lo que, según los investigadores, las convierte en terreno de estudio privilegiado para indagar en los efectos puros de la Educación diferenciada, sin la contaminación de los factores asociados al nivel económico y cultural de los estudiantes, que siempre han contribuido a relativizar los supuestos beneficios de este tipo de enseñanza en otros países.

Así, detraído el efecto estatus vinculado en el resto del mundo a los colegios de un solo sexo, el resultado del estudio ha demostrado que los alumnos y las alumnas de las single-sex schools tienen mejores resultados académicos que los que asisten a escuelas mixtas.

Otra de las peculiaridades de esta investigación es que quienes resultan más aventajados son los chicos, en contra de la tendencia generalizada a creer –porque investigaciones previas en otros países así lo han concluido– que quienes salen ganando de la separación son las chicas.

La ventaja de las alumnas de colegios femeninos respecto a las de mixtos es de 1,3 puntos más. En el caso de los chicos, los de las escuelas masculinas sacan 2,2 puntos más que sus compañeros de mixta en el examen de Coreano y hasta 3 puntos más en el de Inglés.

El estudio no define el baremo de puntuación coreano para poder deducir si tres puntos es mucho o poco, aunque los investigadores aseguran que es mucho porque dos puntos pueden ser decisivos para entrar en la carrera deseada o quedarse fuera.

También queda demostrado que los colegios de Educación diferenciada envían a más estudiantes a los grados universitarios de cuatro años (un 3,1% más de chicas y un 5,6% más de chicos) que los mixtos, y que su presencia es menor en los estudios de sólo dos años (un 3,2% menos de chicas y un 2,7% menos de chicos).

Para lograr una “mayor credibilidad”, los investigadores han tenido en cuenta las posibles diferencias que puede haber entre unos colegios y otros: ratio de alumnos por profesor (mayor en la diferenciada); experiencia de los docentes y duración en el centro (la plantilla de los privados es más estable); el sistema de ingreso por el que han pasado éstos, la proporción de estudiantes que reciben apoyo de comedor –como indicador del nivel económico de los alumnos– y la titularidad de la escuela –si es pública o privada–.

Con todas estas variables sobre la mesa, el efecto de mejor rendimiento en las aulas de un sólo sexo queda levemente atenuado, aunque los investigadores sostienen que sigue siendo notable y válido para un 90% de los casos.

El estudio asegura que el profesorado en la Privada no es de mayor calidad que en la Pública y que estudiar en un privado “no está asociado de manera significativa con unos mejores resultados”.

En cambio, sí queda demostrado que “las escuelas con mayor porcentaje de alumnos que reciben ayuda de comedor sacan una puntuación más baja tanto en Coreano como en Inglés”, lo que significaría que el nivel económico de las familias sí condiciona el rendimiento de los hijos en la escuela. En este sentido, hay que recordar que en la enseñanza surcoreana el poder adquisitivo familiar no está vinculado ni a la titularidad del colegio en el que estudian los niños ni al tipo de enseñanza que reciben, lo que confiere un valor extraordinario a los hallazgos del estudio, según destacan sus propios autores.

La investigación incide en otra revelación, sobre la que llama a indagar en posteriores estudios: que el género de los profesores es un factor “potencialmente determinante” en el rendimiento del alumnado. Es decir, que a las chicas les beneficia tener profesora y a los chicos tener profesor.

Una “buena solución” contra el fracaso escolar

Los investigadores de la Universidad de Pennsylvania se limitan a indagar en el rendimiento del alumnado a través de las notas y del alcance de futuro académico, que es en lo que se centra la mayoría de estudios sobre Educación diferenciada. No abordan el perjuicio, más bien europeo, respecto a la discriminación sexista y la desigualdad que algunos ideólogos atribuyen a esa opción pedagógica.

Es más, el estudio apela a otras investigaciones que sostienen que la Educación diferenciada beneficia a las chicas en cuestión de autoestima, de actitud ante los roles de género y de sus aspiraciones académicas y profesionales. De este modo, los investigadores se alinean con la idea de que los colegios de un sólo sexo, al quedar demostrado su mayor éxito, contribuyen a la igualdad de oportunidades de las mujeres, sobre todo en sociedades patriarcales y machistas.

También apelan a la ausencia de evidencias rotundas, hasta ahora, de que la diferenciada beneficie a los chicos. Por eso, dan tanta importancia al resultado que arroja la investigación en los colegios de Seúl.

El mayor rendimiento demostrado en las aulas masculinas fue destacado en el reciente Congreso Internacional de Educación Diferenciada, celebrado en Lisboa, donde se apostó por la enseñanza separada para combatir el alto fracaso escolar masculino.
“Dejémonos de prejuicios y de ideologías. Tenemos una realidad, que es el fracaso escolar, abrumador entre los chicos. Admitamos que la diferenciada puede ser una buena solución y probemos ”, aboga Gloria Gratacós, directora del área de Educación del Centro Universitario Villanueva, adscrito a la Universidad Complutense.

Alemania y EEUU
Gratacós, que fue quien divulgó en Lisboa el estudio sobre Corea, recuerda que en EEUU el Gobierno está fomentando la diferenciada en escuelas públicas, o cómo en algunos lander alemanes se ha aprobado que los colegios puedan separar por sexos para mejorar el rendimiento.

Además, subraya, “no hay ningún estudio que diga que chicos y chicas se respetan menos por ir a colegios de un único sexo. Lo que sí está demostrado es que la Educación mixta no ha conseguido resolver los problemas de falta de respeto de género que tenemos”.
“Aquí se da por hecho que si están todos juntos los valores entran solos”, critica. “Coeducación no es poner a niños y niñas en la misma aula, sino enseñarles a respetar al otro y a corresponsabilizar a hombres y mujeres en la construcción de la sociedad”.

• Una sociedad machista, número uno en PISA
• Corea del Sur se erigió en número uno del estudio PISA realizado en 2009, superando a la hasta entonces consolidada Finlandia.
• En Seúl, donde se centra el estudio, la Administración distribuye al alumnado de manera aleatoria en colegios privados y públicos, mixtos y de un solo sexo. No hay diferencias socioeconómicas significativas entre el alumnado de unos centros y otros.
• La mayoría de los colegios de un solo sexo son privados; un 20% son públicos. Sólo el 30% de las escuelas de ambos sexos son privadas.
• La muestra de población estudiada es la siguiente: 46.191 chicos de 68 centros masculinos y 45.879 de otros 68 mixtos, y 42.162 chicas de 60 colegios femeninos y 42.042 de otros 68 mixtos.
• Los indicadores que se tomaron como referencia son: la nota obtenida en el examen de acceso a la universidad, en los exámenes de Lengua Coreana y de Inglés, y el porcentaje de estudiantes que se decantan por estudios universitarios de cuatro años (los de máxima duración) y de dos.
• Los investigadores son los primeros en advertir de que la sociedad surcoreana es “patriarcal” y el país ocupa el puesto 64º (de 93 países) en el programa de igualdad de género de la ONU. También es el Estado de la OCDE con mayor diferencia de salarios entre hombres y mujeres. Las mujeres surcoreanas, tengan estudios o no, tienen como aspiración prioritaria casarse y dedicarse a su marido. Pero el estudio no aborda si la posibilidad de una menor ambición académica podría explicar que la diferencia de resultados entre chicas de mixta y diferenciada sea menor que entre los chicos (al contrario que ocurre en otros países).