La Seguridad Vial pide un hueco en el currículum escolar
Fundación Mapfre ha presentado su informe La Educación Vial en el entorno educativo: padres, profesores y alumnos.
En palabras de Filomeno Mira, vicepresidente de Fundación Mapfre, el Instituto de Seguridad Vial de la fundación, responsable de elaborar este informe, trabaja para “transmitir valores, hábitos y conductas responsables a niños y jóvenes”. Su labor se desarrolla en la “prevención, reducción, sensibilización, formación e investigación”, añadió. En esta línea de investigación, la fundación realiza distintos informes como el que acaban de presentar. La importancia de este tipo de estudios y su posterior aplicación al mundo educativo viene dada porque “la Educación es la clave en la seguridad vial”, como explicó Bartolomé Vargas, fiscal de sala de Seguridad Vial. Vargas afirmó que en España “nos falta dar un paso” por la seguridad vial, pues la Educación Vial “no está en la ley y tiene que haber Educación Vial en los colegios”. El fiscal compartió su “esperanza y deseo” de que la Lomce, que ahora se tramita, acabe incluyéndola, ya que “la mejor manera de prevenir los delitos y tragedias es la Educación del pueblo”.
Los niños educan
Julio Laria, director general del Instituto de Seguridad Vial de la Fundación Mapfre, fue el encargado de presentar los principales datos que se extraen de este informe que se ha elaborado gracias a la colaboración de 1.800 padres, profesores y alumnos. En 2012 murieron 52 niños, 373 resultaron heridos graves y 4.982 leves. “No podemos estar conformes con esta situación, éste es nuestro reto”, explicó.
De los datos obtenidos se desprende que los profesores creen que se dan pocas horas de Educación Vial. El 54% de los encuestados invierte menos de tres horas al trimestre. El 51,1% de los padres comparte esta sensación de que se dedica poco tiempo a la seguridad vial.
El 95% de los alumnos, por su parte, están contentos con la forma en la que les enseñan las normas de circulación y seguridad. Especialmente les gustan las actividades de tipo práctico y las que utilizan soportes TIC. Estos niños que aprenden seguridad vial se convierten en profesores de sus padres. Así, el 40% les riñen para que no hablen por el móvil cuando conducen, el 31% les hacen esperar a que el semáforo se ponga en verde para cruzar y el 30% les animan a no enfadarse con otros conductores.
Éstos son solo algunos de los datos que se extraen del recién publicado informe. Julio Laria aprovechó su presentación para recordar que el objetivo de su instituto es “fomentar la enseñanza de la Educación Vial en los centros escolares, facilitando al profesor su tarea a la hora de poder implementarla dentro del currículum escolar”. Laria se refirió a los recursos educativos gratuitos que ofrece la fundación –entre los que hay libros, herramientas, actividades variadas– afirmando que “no hay excusa para no hacer bien un trabajo de Educación Vial con los niños y adolescentes” en los centros educativos.