Alumnos de Infantil aprenden la lectoescritura con juegos

La lectura y la escritura son habilidades importantes en la comunicación integral del niño, tanto para su desarrollo cognitivo como para su personalidad. Un buen nivel de competencia lectoescritora será el pilar de todo el desarrollo posterior del niño en su ámbito curricular y pedagógico. En la etapa de Educación Infantil lo fundamental es que los niños disfruten de la lectura, se familiaricen con ella y quieran leer por su cuenta. Además, deben sentir confianza en sus propias posibilidades y en las ayudas que reciben para aprender a lo largo de un proceso dilatado y personal. Por ello es fundamental estimular la motivación para leer y escribir a fin de divertirse, informarse y comunicarse.
En el actual proyecto de innovación educativa desarrollado en la clase de 3º A de Infantil del Colegio Marista “San José” de León, se ha pretendido aunar la introducción de una metodología más lúdica y motivadora para la enseñanza y el aprendizaje de la lectoescritura en el aula y el trabajo en valores con el manejo de las TIC –concretamente con la creación de un Edublog y una app móvil específicos para el proyecto en cuestión–.
La metodología se basó en la asignación a cada niño de una letra diferente según la caracterización indicada en el método El país de las letras, ya que es el utilizado en el ciclo de Educación Infantil. De este modo, cada niño se convirtió en un personaje y representó su papel como si de una obra de teatro se tratara. No solo tenía que ser capaz de identificar su letra, sino que además debía conocer con todo lujo de detalles cuáles eran sus rasgos característicos y su función en Letrilandia. Con dicha metodología se pretendía que los niños fueran auténticos protagonistas en su aprendizaje de la lectoescritura, estuvieran motivados y se divirtieran al mismo tiempo que aprendían a leer y a escribir.
Una vez que el pequeño tenía asignado su personaje de Letrilandia, debía trabajar en equipo con su familia para aprender cuáles eran sus rasgos característicos, así como los principales valores con los que se identificaba en El país de las letras. A partir de ahí, y desa-rrollando todo lo posible la imaginación, había que elaborar material que guardara relación con dichos caracteres para poder luego exponerlos al resto de la clase durante su jornada de presentación.

Protagonistas de cuento
Dicha jornada consistía en que el niño, caracterizado lo máximo posible de su personaje –con un disfraz sencillo en el que se dibujaba la letra correspondiente, de forma que todos fueran más o menos disfrazados del mismo modo–,se presentara al resto de sus compañeros como si fuera el protagonista de un cuento y les ofreciera, además de su historia en El país de las letras, una serie de materiales y actividades que les permitieran recordarle más fácilmente. Al mismo tiempo se iban divirtiendo y motivando para seguir recibiendo al resto de letras. Se indicó la elaboración de una especie de periódico, con unas determinadas características estructurales para que hubiera uniformidad en todos ellos, cuyo nombre era El colegial semanal. La principal noticia era la llegada de esa letra a clase, pero también se podían incluir todo tipo de noticias relacionadas o no con el aula, así como pasatiempos, cuentos, canciones, dibujos y fotos. Al final del curso escolar se utilizaron todos los colegiales para la creación de un libro recopilatorio y se entregó un ejemplar a cada niño.
Como ejemplo y de forma resumida, uno de los trabajos presentados fue el de la enfermera C, que promueve las normas básicas de respeto a la diversidad. Esta aportó frases célebres sobre dicho tema, así como un juego al que llamó La oca de la c. En él entregó a cada niño una cartulina con la silueta de un juego de la oca que incluía un tablero con casillas relacionadas con la letra c para recortar, un dado para montar y unas fichas que había que colorear.
La tutora creó un edublog, http://innovaconnosotros3ainfantil.blogspot.com, que se convirtió en la herramienta básica de comunicación escuela-familia, ya que en él se iban plasmando todas las actividades y aportaciones del alumnado, incluidos los ejemplares de El colegial semanal digitalizados, así como información relacionada tanto con el proyecto como con el trabajo en el aula. Este blog se convirtió en el nexo de unión y comunicación, no solo de la tutora con los padres, sino de las distintas familias entre sí a través de un foro de participación y seguimiento.
No hay mejor valoración que la de los propios protagonistas. Estas son algunas de las opiniones que los padres aportaron en el blog acerca del proyecto: unos dicen que“el blog es como un mapa del tiempo, nos muestra día a día el trabajo que realizan los niños y nos da la posibilidad de intercambiar opiniones, dudas y experiencias con otros padres y la profe”. La familia de una de las participantes asegura que esta está “muy ilusionada con el blog. Nos dice que lo miremos porque ha llegado una letra nueva o han realizado un baile. Le encanta realizar las actividades de mates mientras se familiariza con el uso del ordenador, es una manera divertida para aprender”.

Coral Chamorro Ordás
Colegio “San José” de León