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Las metodologías digitales más efectivas en contextos híbridos

Sistemas de Tutoría Inteligentes (STI), Aprendizaje Basado en Juegos (ABJ), Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP) o ‘flipped classrom’ son algunos de los métodos educativos que aumentan el ‘feedback’ docente y la motivación del alumnado en entornos híbridos.
Adrián ArcosMartes, 29 de septiembre de 2020
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© ANCHALEE

Dentro de entornos tanto híbridos como online, encontramos una herramienta efectiva en términos de aprendizaje que ayuda a aumentar la presencia y el feedback docente: los Sistemas de Tutoría Inteligentes (STI). Según el informe ¿Qué sabemos sobre la efectividad de las tecnologías digitales en la Educación?, realizado por el Instituto Catalán de Evaluación de Políticas Públicas (Ivàlua) y la Fundación Bofill, estos sistemas, combinados con las herramientas de representación gráfica, mejoran el aprendizaje en competencias matemáticas y científicas en comparación con entornos que no usan este tipo de software.

Mediante un feedback inmediato, los STI ayudan a generar hipótesis y predicciones, recopilar, analizar e interpretar datos, y reflexionar, y, por tanto, son adecuados en estrategias ABI (Aprendizaje Basado en Indagación) y para materias STEM. Un ejemplo de sistema de tutoría inteligente para Matemáticas en Secundaria es Aleks, una herramienta basada en la teoría de los espacios de aprendizaje, creada por la editorial McGraw Hill.

Aleks, un ejemplo de STI

Aleks es un sistema de evaluación y aprendizaje web con Inteligencia Artificial. Utiliza interrogatorios adaptativos para determinar de manera rápida y precisa lo que un estudiante sabe o no sobre un tema. A medida que el estudiante trabaja durante el curso, la evalúa periódicamente para asegurar el aprendizaje significativo de los temas aprendidos.

En cuanto a la evaluación, Aleks evita preguntas de selección múltiple. También proporciona las ventajas de una enseñanza individual, asíncrona y ubicua, accesible desde cualquier ordenador conectado a internet. Según el estudio de Ivàlua y Fundación Bofill, Aleks no tiene ningún efecto negativo, y sí que muestra un efecto positivo sobre el aprendizaje de los estudiantes, en comparación con otros tipos de herramientas.

Apps y redes sociales

Dentro de la modalidad mixta, otras herramientas que facilitan la interacción entre iguales son las apps de mensajería, los blogs y los foros. También herramientas digitales tan utilizadas como los test y cuestionarios autoadministrados tienen un efecto positivo en el logro y la motivación de los estudiantes en contextos híbridos. En concreto, las herramientas más efectivas son las que permiten hacer preguntas online o test integrados en vídeos (Quizzes, Socrative…).

En cambio, el uso de Facebook y otras redes sociales presenta resultados negativos y no está directamente vinculado a mejoras en el aprendizaje.

El ABJ, muy positivo

La estrategia relacionada con el uso de las tecnologías digitales que presenta más fuentes de evidencia es el Aprendizaje Basado en Juegos (ABJ). Los informes que estudian la efectividad muestran una relación positiva de esta estrategia con los resultados de aprendizaje, en concreto, si se aplica con una base pedagógica cognitivista con interacción, mejora la adquisición de contenidos, competencias y la implicación de los estudiantes.

El ABJ en Primaria es más efectivo que en Secundaria, y también los juegos individuales más que los multijugador. Además, esta estrategia es más efectiva cuando utiliza videojuegos en lugar de simulaciones y mundos virtuales. Los estudiantes de Primaria y Secundaria encuentran esta metodología útil para aprender Matemáticas, Ciencias Sociales y vocabulario, y también se sienten más motivados.

Más interacción con el ABP

El Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP), con un enfoque colaborativo y cooperativo, ha sido también abordado en este estudio.

La colaboración y cooperación explícitas mejoran la interacción de los alumnos en las modalidades online, en comparación con otras estrategias que no facilitan explícitamente esta interacción.

La ‘flipped classroom’

Por último, la metodología de la flipped classroom o aula invertida, más habitual en las etapas superiores, muestra buenos resultados cuando se aplica en Secundaria, y se muestra inefectiva en áreas que requieren un aprendizaje muy práctico y mucha interacción –el alumnado puede quedar bloqueado durante el tiempo de aprendizaje autónomo–.

Pero, por lo general, esta metodología genera una mayor satisfacción en los alumnos porque posibilita disponer de feedback más rápidamente.

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