Unidos por la pizarra digital

Sustituir el tradicional apoyo con que ha contado el profesor desde hace siglos por otro más dinámico e innovador es una tarea ardua para tenerla presente como objetivo inmediato. La pizarra y la tiza son el símbolo de los profesores en todo el mundo, símbolo que refleja un instrumento que alberga el saber memorístico, conceptual, estratégico o metodológico de quien lo usa, sin mostrar más que aquello que apoya la explicación de viva voz; a este instrumento hay que reconocerle la validez y protagonismo que tanto tiempo ha tenido, y aún hoy tiene, resaltando, remarcando la importancia o preponderancia del profesor en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Con nuevos instrumentos o recursos novedosos en un tiempo actual, las anteriores concepciones pueden tal vez permanecer, o pueden derivar en una dinámica diferente según crea oportuno el profesor permitiendo metodologías paralelas, alternativas y enriquecedoras, optando por un mayor protagonismo del alumnado.

Es por ello que la Pizarra Digital se plantea como una alternativa a la pizarra tradicional y no como sustituta. Creo que todo proceso ha de tener el tiempo y cadencia adecuados y la correcta integración de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en la Educación es, sin duda, todo un proceso a medio-largo plazo.

¿Qué es Pizarra Digital?

Pero, ¿qué entendemos por Pizarra Digital? Según la definición de Pere Marqués ( 2002), “es un sistema tecnológico que consiste en un ordenador multimedia conectado a internet y un videoproyector que proyecta a gran tamaño sobre una pantalla o pared lo que muestra el monitor del ordenador”.

El autor citado lleva a cabo un estudio de investigación (se puede consultar en la dirección dewey.uab.es/pmarques/pizarra.htm) que pretende llevar a los centros y en varias aulas pizarras digitales para que los profesores recojan impresiones, opiniones y fundamentos de lo practicado.

El coste de un ordenador es importante e insuficiente como recurso para toda una clase; por el mismo precio la pizarra digital puede satisfacer las necesidades de un aula, pero su potencial colectivo es mucho mayor.

La forma de implantación en un centro es desigual, pudiendo ser en un único aula (de informática, por ejemplo), en varias (con un armario multimedia o una pizarra digital móvil) o en cada una si se considera la posibilidad (ideal) de dejarla fija en el aula.

Es lógico que para ello sean necesarios recursos tecnológicos que no todos los centros pueden permitirse; por esta razón y también de una forma desigual, se está extendiendo esta iniciativa por las distintas Comunidades Autónomas del territorio español (con y sin apoyo institucional, dependiendo de las CCAA) y por parte de territorio europeo y americano.

Por otro lado, para cubrir las necesidades y expectativas del profesorado, es necesario y/o conveniente que esta propuesta esté acompañada de una serie de recursos didácticos y materiales como entendemos que puede ser lo que denominamos buenas webs, buenas prácticas educativas y buen uso de la pizarra digital. Para ello, cada comunidad autónoma intenta acercar los contenidos más próximos a los usuarios, sin descartar, lógicamente, contenidos de otros lugares que han sido contrastados y experimentados por profesores. En algunos casos se ofrecen recursos elaborados por profesores e incluso por alumnos, como se puede observar en la página web de la Pizarra Digital de la Comunidad Valenciana (www.emh.jazztel.es) para facilitar al profesorado herramientas con las que construir el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Justificación

La integración de las TIC en el sistema educativo ha de estar sustentada en ciertas bases sobre las que se construye el conocimiento en torno al alumnado, eje o centro sobre el que inciden el resto de factores: los recursos tecnológicos, el apoyo institucional, los profesores y los contenidos que, tratados de una u otra forma, en base a herramientas como ésta, permiten el cambio de metodología hacia otra más participativa y activa.

Los recursos tecnológicos son los útiles que permiten el avance; el apoyo institucional proporciona la solidez o afianzamiento de la correcta integración; los contenidos son fundamentales en el nuevo tratamiento que se la ha de dar al conocimiento manejando la información y facilitando la comunicación; los docentes presuponen el factor fundamental de orientadores y guías de todo el proceso y para el que se requiere de competencias mínimas y necesarias que ya se comienzan a fijar como objetivos para los alumnos en algunos países de la UE y de América del Norte y del Sur, y pronto también para profesores.

Acercamiento de las TIC al aula

El salto cualitativo de conocimientos para docentes esencialmente y que algunos autores denominan brecha digital (social, educacional, etc.) puede llevar años de fracasos y esfuerzos inútiles que terminan sucumbiendo al desánimo o a la sensación de pertenecer a una generación perdida.

Si no hay recursos suficientes (ordenadores) como para introducir en las aulas la tecnología actual, si el apoyo institucional no se percibe como cercano o si las competencias del profesorado son insuficientes, el fracaso está asegurado, la brecha digital no hará sino aumentar con el paso de los años y no podrán abordarse, ni tan siquiera contemplarse los contenidos digitales, o el tratamiento de la información de forma paralela al avance tecnológico.

Hoy por hoy, es esencial pensar en el acercamiento de las Tecnologías de la Información y la Comunicación al aula, buscar el necesario encuentro entre el profesor y el desarrollo digital, confluir en un punto de entendimiento sin necesidad de dejar por el camino una parte de sí mismos.

Hay muchas formas de hacerlo, pero qué duda cabe que la Pizarra Digital es una buena forma de intentarlo, sencilla en su manejo, próxima y similar a otros formatos, capaz de mostrar a una clase boquiabierta una película o documental en formato dvd con subtítulos, una página web que reproduzca de forma animada un hecho científico, permitir una presentación realizada por los alumnos de sus investigaciones en internet, de recrear un taller de juegos, de diseñar programas, de hacer un recorrido por el Universo, de efectuar una videoconferencia o utilizar el correo electrónico compartiendo experiencias con lugares remotos y para toda la clase, de dibujar trazos en una pizarra blanca sobre la proyección, creando así esquemas dinámicos y visualmente efectivos, creando y construyendo, investigando y orientando, preguntando y respondiendo, dibujando y ensayando, observando, implicando, y también divirtiendo.

E. MARTÍNEZ HDEZ
CP “Romualdo Ballester”
Torrevieja (Alicante)