Mejoramos las capacidades físicas y psicológicas de los alumnos con yoga

La práctica del yoga permite conseguir un estado de ánimo relajado y saludable. En el CEIP “Manuel Núñez de Arenas” de Getafe (Madrid) se ha aplicado esta técnica milenaria a las clases con excelentes resultados. El yoga ayuda a eliminar el estrés en los niños, mejora su capacidad física, concentración y autoconocimiento, y estimula su imaginación y fantasía de una manera amena y divertida.
Según el Anexo del Real Decreto 1630/2006 de 29 de diciembre por el que se establecen las enseñanzas mínimas correspondientes al segundo ciclo de Educación Infantil, el área que está claramente vinculada con el Desarrollo de este tema es Conocimiento de sí mismo y Autonomía Personal. Por eso nuestros objetivos principales son:  
• Conocer y representar el propio cuerpo, sus elementos y algunas de sus funciones, descubriendo las posibilidades de acción y de expresión, y
coordinando y controlando cada vez con mayor precisión gestos y movimientos.
• Identificar los propios sentimientos, emociones, necesidades o preferencias, y ser capaces de denominarlos, expresarlos y comunicarlos a los demás, identificando y respetando también los sentimientos de los otros.
En cuanto a contenidos hacemos referencia al Juego y movimiento a través del control postural, buscando el el progresivo control del tono, el equilibrio y la respiración. Satisfacción por el creciente dominio corporal.
En el cuidado personal y la salud hacemos hincapié principalmente en acciones y situaciones que favorecen la salud y generan bienestar, el propio y el de los demás.
Este tema lo abordaremos contestando a unas preguntas básicas:
• Qué es el yoga.
• Por qué lo realizamos –eneficios que aporta el yoga a los niños–.
• Cuándo y dónde.
• Cómo lo realizamos –posturas de relajación–.
El yoga es una disciplina milenaria cuya forma de entender la vida es a través de ejercicios de respiración y posturas que expanden o amplían nuestra percepción por medio de nuestra mente y nuestro cuerpo para lograr descubrir quiénes somos en realidad –armonía física y mental–.
La relajación –tratada con ejercicios y posturas de yoga o asanas– la efectuamos diariamente después del tiempo de recreo; le dedicamos aproximadamente cinco minutos y se trabaja en la colchoneta de la clase.
Después de la sesión semanal de psicomotricidad también tenemos nuestro tiempo para la relajación para terminar de una manera más detenida. Ésta se realiza en el gimnasio del cole, donde podemos disponer de más sitio que en el aula a la hora de realizar las diferentes posturas, respetando el espacio personal. Además, nos extendemos más en el tiempo y los alumnos lo realizan de manera satisfactoria.

El yoga como un juego
Realizamos las posturas de yoga porque nos ayuda a mantener relajados a los niños de una manera amena y divertida porque estimula su imaginación, fantasía… y lo tratan como si fuera un juego.
Los beneficios que aporta a los alumnos –favoreciendo la salud– son, entre otros: eliminar el estrés infantil; a mejorar la circulación, la flexibilidad, la concentración y el aprendizaje paulatino de una buena respiración –inspiración y espiración por la nariz a ritmo lento–, así como el conocimiento de sí mismos, y a proporcionarles calma y vigor, además de desarrollar el tono  muscular.
Todo esto sin olvidarnos de trabajar también la psicomotricidad, la relación con los iguales…

Evaluación
Se realizará a través de posturas o ejercicios de yoga, asanas expresamente dedicadas para los niños, las cuales les divierten y entretienen mucho.
Presentamos algunas de ellas , entre las muchas que existen:
• E perro.
• El triángulo.
• El árbol.
• Las tijeras.
• La rana.
• El león.
• La cobra.
• El puente.
• La flor de loto –haciendo cambio de cruce de piernas–.

Desarrollo

• Para empezar a desarrollar la relajación se sienta a los niños imitando a los indios, tras lo cual empezamos. Por ejemplo, decimos en voz alta: “primera postura de relajación: el perro”, y ellos la realizan. Nosotros contamos entonces hasta diez. Después, a una señal, seguimos con la segunda postura de relajación, el triángulo, y contamos otra vez hasta diez, y así sucesivamente hasta terminar todas las posturas previstas en la sesión.
• La última en realizar será la postura de flor de loto porque en ella se puede prolongar más tiempo el conteo. Al hacer esta figura les decimos a los alumnos que cierren los ojos y piensen en algo muy bonito para ellos…
• Otra actividad que se realiza normalmente consiste en realizar un librito en el que los niños recortan y colorean algunas de las más conocidas posturas de yoga.

P. García, J. Hidalgo, M. A. Martín, M. J. Martín, M. P. Ponce y Mª del Mar Rubio
CEIP “Manuel Núñez de Arenas” de Getafe (Madrid)