Castilla-La Mancha plantea reorganizar a los alumnos según su esfuerzo

El Gobierno de Castilla-La Mancha plantea "reorganizar" a los alumnos dando un trato diferenciado a "aquellos que de verdad quieren sacrificarse" respecto a los que "no quieren esforzarse tanto" como medida para afrontar el elevado fracaso escolar y potenciar, a su vez, la "excelencia" educativa.

Este planteamiento, que apunta el consejero de Educación, Marcial Marín en una entrevista con la Agencia Efe, se incluirá en el plan de choque contra el fracaso escolar que el Gobierno regional va a poner en marcha y que ya anunció María Dolores de Cospedal en su programa electoral.

"A aquellos que de verdad quieren sacrificarse y aprender, habrá que reorientarlos hacia una enseñanza de calidad, y a aquellos que estén más en la pasividad del día a día, hay que orientarlos a otros módulos más adecuados a la FP y a la realidad laboral inmediata, para que también tengan su salida", asegura el consejero.

Marcial Marín no descarta establecer un Bachillerato de excelencia similar al que este curso pone en marcha la Comunidad de Madrid.

"Es una de las opciones –explica–, lo que hay que apostar es por la excelencia en el sentido de aprovechar a todos los alumnos que en Castilla-La Mancha quieran progresar, que tengan la oportunidad de hacerlo".

Y añade: "flaco favor haríamos al futuro de esta tierra desaprovechando a los alumnos que quieren progresar y no dándoles los medios y obligándoles a estar en clase con alumnos que no lo desean".

Critica la elevada tasa de fracaso escolar y considera que es un "insulto" que 33 de cada 100 estudiantes de Castilla-La Mancha abandonen sus estudios antes de finalizar la enseñanza obligatoria.

En este sentido, avanza que el plan de choque contra el fracaso escolar se aplicará "desde lo más básico" porque "hay alumnos a los que no les interesa la escuela" que pueden restar "eficacia o rendimiento académico" a quienes desean aprender.

Junto a este plan, Marín apunta otras medidas para afrontar el fracaso escolar como la Ley de Calidad en la Educación que comprometió la presidenta Cospedal, potenciar los planes de plurilingüismo y reforzar la autoridad del profesorado.

También destaca la puesta en marcha de módulos téorico-prácticos para aumentar el número de emprendedores y que cambie la perspectiva actual de una juventud "en la que 9 de cada 10 quieren ser funcionarios".

Y plantea la creación de nuevos sistemas de evaluación para corregir "lo que se hace mal", algo que no llevó a cabo el anterior Gobierno socialista, según critica.

En este sentido, Marín alude al último Informe PISA, en la que participaron voluntariamente, con una población escolar ampliada, todas las comunidades autónomas excepto Castilla-La Mancha, Extremadura y Valencia.

Marcial Marín sostiene que los planteamientos políticos "no se consiguen sólo con gestos" sino con leyes y ahí enmarca la Ley de Calidad en la Educación, que es la "gran apuesta" de Cospedal esta legislatura.

Para conseguir una Educación de calidad, el consejero habla de "reorganizar los recursos" y plantea la modificación del actual sistema de gratuidad de los libros de texto, de modo que "se ayude mucho más a los que más lo necesitan".

En su opinión, el sistema actual "ha ayudado mucho" pero no se aplica a todos los cursos y ocurre que "muchas veces" la ayuda "no llega como debería a las familias con menos recursos", asegura.

La opción que planteará a los padres de alumnos, a los centros educativos y a los sindicatos será tener en cuenta la renta de las familias para otorgar los libros gratuitos.

"Hay muchas cosas que mejorar en un sistema que está ayudando, pero que todavía puede ayudar mucho más a los que más lo necesitan", asegura.

Marcial Marín considera necesario, por ejemplo, reorganizar las rutas escolares para evitar que haya autobuses que viajen con uno o dos alumnos a sus centros de estudios.

El objetivo es "reorganizar los recursos para conseguir un mejor futuro y una Educación de calidad".