Robots, aplicaciones y páginas web para aprender a programar

¿Qué pensarías si te dijera que cualquiera puede hacer casi todo lo que se imagine con Scratch? Me refiero a que puedes hacer que se mueva, que salte, que hable, que se ría. Puedes hacer que se enfade, que vuele, que corra, etc. Puedes poner millones de escenarios, uno para cada escena. Puedes también poner millones de personajes y que aparezcan y desaparezcan de los escenarios a su antojo. Puedes crear programas, historias, videojuegos, cómics o dibujos.

Por ejemplo, podría interesarte –si tuvieras un niño de 7 u 8 años– crear un pequeño programa donde hacer que, cuando el jugador presiona el play, aparezca un escenario de bienvenida con un personaje fantástico. Este personaje diría “bienvenido a mi programa”. Después de unos segundos, el escenario cambiaría a un campo con árboles, donde aparece un murciélago que diría “pincha encima de mí si quieres que vuele”. Puede acceder al proyecto completo en scratch.mit.edu/projects/151157716/.

¿Qué dirías si te dijera que, además de hacer todo esto, podría también con ese mismo programa mover un pequeño robot con un pequeño motor un par de sensores y que podría combinarlo todo para construir un gran programa, donde interactúa una parte digital con la parte física –robot–?

Pues todo esto es real, lo estudiamos en clase en la asignatura de Robótica y se llama Scratch. El objetivo era que pudieran desarrollar su imaginación y creatividad utilizando la programación por bloques y acercarlos a los fundamentos de la programación y el pensamiento computacional.

La robótica educativa es una herramienta totalmente accesible para los padres. Deberían ser informados y tener información para saber diferenciar qué se les está ofertando como robótica educativa y qué muchas veces no lo es. Ha surgido una especie de burbuja donde se han multiplicado exponencialmente plataformas y sistemas de programación educativa que finalmente no han triunfado. Lo que se ha comprobado es que todos estos sistemas que han intentado mejorar Scratch han fracasado estrepitosamente, y esto es porque Scratch no es un programa más; Scratch debe ser la base de la robótica y la programación educativa.

En Estados Unidos se creó la fundación Code.org con el patrocinio de empresas como Facebook, Google, Apple, Microsoft, Amazon y con el apoyo del Gobierno. Basándose en la filosofía de la programación por bloques introducida por Scratch, diseñaron todo un completo recorrido curricular para que los alumnos y alumnas empezaran a trabajar con la programación desde Primaria. Si tienen posibilidad, les recomiendo que entren en estas páginas web code.org y hourofcode.com.

Igual que hacemos con las Matemáticas o con el resto de asignaturas, es necesario crear un recorrido vertical para la robótica y la programación educativa con los contenidos y habilidades que los estudiantes deben ir adquiriendo a lo largo de cada etapa. La Royal Society, una de las sociedades científicas de más prestigio del mundo, publicaba un informe con un título más que indicativo: Shut down or restart. En tal informe instaba al Departamento de Educación del Reino Unido a que mejorara la enseñanza de las ciencias de la computación. El 1 de septiembre de 2014 una nueva materia denominada Computing comenzaba a aplicarse en los colegios del Reino Unido.

Cuando me pongo en clase delante de mis alumnos más mayores de 6º de Primaria a diseñar una aplicación para el móvil, tengo la certeza de que pueden existir cosas que me pregunten y que yo desconozca. Si me entrara el pánico y esperara a dominar al cien por cien todas las herramientas que estamos viendo en clase para poder enseñarlas, no podría enseñar esta asignatura. Las comunidades de aprendizaje tienen más que ver con un profesor orientador y motivador que ayuda a sus estudiantes a investigar y a adquirir los conocimientos por ellos mismos. Para que el alumno suba un poco es necesario que el profe baje un poco. Cuando hay alguna pregunta que no sé cómo responder, lo primero que hago es devolver la pregunta al resto de la clase: ¿alguien sabe cómo cambiar la imagen de este botón en esta aplicación de móvil? o ¿cómo puedo hacer que este robot diga stop al ver con el sensor en el suelo el color rojo? Casi siempre alguien responde…

Los entornos donde ellos desarrollarán su labor profesional serán con seguridad entornos multiplataforma, donde tendrán que dominar diferentes programas, sitios web, intranets, etc. Pienso que esa actitud ligeramente arriesgada y curiosa les va a ayudar a desenvolverse con menos dificultad en estos entornos. Este pequeño recorrido que empieza con un gato naranja que soñamos en que se convierta en el primer paso de grandes profesionales apasionados con lo que hacen.

Los estudiantes dejan de ser meros usuarios TIC
•Los juegos como el ajedrez, la oca, las damas, que antes se jugaban en un tablero, ahora están virtualizados. Una gran parte del entretenimiento se ha desplazado de entornos físicos a entornos virtuales. Las personas dedicadas a “crear entretenimiento” para los más pequeños trabajan en el mundo digital porque es allí donde los niños y las niñas están jugando. También tenemos espacios en familia para jugar con sus juguetes, bailar, hablar con los amigos, comer, no hacer caso del teléfono, pasear por el campo, hacer ejercicio, etc. Que mucho del entretenimiento esté virtualizado no significa que todo esté allí. El uso que hagan mis hijos de la tecnología creo que va a tener mucho que ver con el uso y la importancia que yo le dé a la tecnología.

•Lo que la robótica educativa nos permite es trabajar varios aspectos simultáneamente. Por un lado, que los estudiantes no solo conozcan y manejen la parte de “consumo” de la tecnología, sino también la parte de desarrollo. El objetivo es que no sean meros “devoradores” de tecnología. La robótica y la programación educativa nos permiten trabajar la parte de diseño de los programas, aplicaciones y videojuegos.

•Conocer cómo son elaborados los programas “por dentro” despierta en los estudiantes una visión crítica sobre los mismos y, por lo tanto, una capacidad mayor de decisión y de elección. Además, nos permite ir desarrollando en ellos una agilidad a la hora de resolver problemas buscando no solo las soluciones correctas, sino los caminos más cortos.

Luis Lago
Colegio “Arcángel Rafael” de Madrid