Diez claves de la evaluación formativa

Existen muchos expertos que hablan de la importancia de la evaluación formativa, pero sin duda uno de los principales exponentes en España es Neus Sanmartí. Para ella debe ser una evaluación útil para aprender. Pero además de ser útil, también debe tener un finalidad reguladora, es decir, debe ser capaz de regular el propio proceso de aprendizaje. Dicha regulación de este tipo de evaluación se centra en dos puntos clave: el refuerzo de los aciertos y la reconducción de los errores a partir de la realización de más ejercicios o tareas de un aprendizaje concreto.

Antes de seguir, hemos de tener claro que en el proceso de enseñanza-aprendizaje tenemos tres momentos a destacar:

–La evaluación inicial.
–La evaluación mientras se está aprendiendo.
–La evaluación final.

Teniendo claro este proceso, debemos entender que la evaluación formativa tiene como propósito informar al estudiante acerca de los logros obtenidos, las dificultades o limitantes observadas en sus desempeños durante la realización de las actividades propuestas en el proceso de mediación pedagógica. A la vez, le permite al docente la búsqueda e implementación de nuevas estrategias educativas que le ayuden a llegar a todos los alumnos y alumnas de su grupo/clase.

Para llevar a cabo una buena evaluación formativa es necesario tener en cuenta unos aspectos claves. Son los siguientes:

1. Objetivos de aprendizaje: Establecido por los docentes y explicados a los estudiantes en cada tema con relaciones lineales entre ellos para que los alumnos establezcan relaciones de conjunto.
2. Criterios para lograr el éxito: Los profesores deben identificar los criterios de evaluación y alinearlos con los objetivos para después ser explicados a los alumnos. Los alumnos deben tener claro en todo momento que se espera de ellos.
3. Estrategias de cuestionamiento para facilitar las evidencias del aprendizaje: Los profesores deben ser los que planteen el debate en el aula. Promover discusiones entre su alumnado para conseguir a través de sus reflexiones y respuestas avanzar en su proceso de aprendizaje.
4. Actividades que muestren evidencias del aprendizaje: Son los docentes los que deben preparar y diseñar actividades que recojan evidencias del aprendizaje de sus alumnos.
5. Informar del aprendizaje al alumno a través de sus evidencias: Es necesario utilizar las evidencias del aprendizaje para promover el proceso de enseñanza-aprendizaje. Además, en este punto se evidencian los logros de los estudiantes y se potencian.
6. Auto-evaluación del estudiante: Es labor de los docentes enseñar herramientas de auto-evaluación al estudiante para que de manera regular o periódica puedan ser capaces de evaluar sus logros y su propio recorrido.
7. Cultura colaborativa del aprendizaje: Los docentes deben crear un ambiente en el que estudiantes y profesores se conviertan en compañeros de aprendizaje. Debemos cambiar el rol en el aula y esto no significa que el docente pierda autoridad.
8. Feedback de los compañeros: El docente debe ofrecer un feedback efectivo, pero además debe conseguir que los alumnos adquieran habilidades para ofrecer y recibir un feedback regular y continuo por parte de los estudiantes.
9. Feedback descriptivo del docente: El feedback ofrecido por los docentes debe ser descriptivo y conectado con el objetivo y el criterio de aprendizaje.
10. Pensamiento extendido durante la interacción: Es labor del profesorado establecer rutinas y estrategias que ayuden al estudiante a ampliar sus conocimientos durante la interacción.