Cataluña dejará a cada centro regular el uso del móvil a partir de un "marco general"

«Seguramente hubiera sido más sencillo comunicar una prohibición de uso de los móviles, pero creemos que esa actuación no tendría la incidencia educativa que tiene el procedimiento participativo para su regulación que hemos decidido iniciar», ha señalado el secretario de Transformación Educativa, Ignasi Garcia, en rueda de prensa junto al presidente del Consejo Escolar, Jesús Vinyes.

En las próximas semanas, se impulsará mediante el Consejo Escolar un proceso participativo con la implicación de toda la comunidad educativa por territorios (12 en toda Cataluña) y que analizará después el Departamento de Educación para dar unas directrices de mínimos que tomarán como base los centros para después concretarlas según su criterio. «Cada uno aterrizará el uso del móvil en su normativa teniendo en cuenta la opinión de su comunidad educativa y su realidad y circunstancias», ha apuntado Garcia, quien ha añadido que el departamento no pretende «ser imperativo». «Para que el móvil tenga una función educativa es importante que haya debate en los consejos escolares y que las familias y alumnos tengan algo que decir», ha añadido.

Además de la opinión de la comunidad educativa, las familias y los propios alumnos, el departamento tendrá en cuenta estudios del Colegio de Médicos y otros análisis internacionales sobre la disrupción cognitiva del móvil de instituciones como Unesco. Asimismo, el Departamento de Educación ha publicitado los resultados de una encuesta sobre uso de móvil en los centros realizada en el tercer semestre del curso pasado, que respondieron el 85% de los centros, y que revela que en un 43% de las escuelas e institutos no se permite el uso del dispositivo en las instalaciones. Ese análisis también apunta que un 12% dejan usarlo en el patio y que un 67% lo permiten en la propia aula, pero a criterio del docente y para momentos puntuales. El uso libre total del móvil solo se estaría dando actualmente en el 3% de centros, según estos datos.

El secretario de Transformación Educativa ha señalado que aplaude la movilización de padres de alumnos que piden prohibir los móviles hasta los 16 años en la medida que «contribuye al debate» que precisamente desde la Generalitat quieren abrir. Además, ha señalado la importancia que los padres se impliquen en el uso del móvil y sus oportunidades educativas en las horas no lectivas. En el caso de Barcelona, el Consejo Educativo se reunirá por primera vez este jueves, y se darán otros debates en otros once territorios, antes de que a finales de diciembre se trasladen al departamento algunas conclusiones.

Sobre cuándo entraría en vigor el nuevo marco, Garcia ha señalado que tras recibir las aportaciones del Consejo Escolar antes de Navidad, hará llegar a partir de enero a los centros las «indicaciones» que seguir para establecer sus nuevas normas de uso del móvil (si no lo tenían ya regulado) a final de curso y «con toda seguridad» ya en el curso 2024-25.

El movimiento ‘Adolescencia libre de móviles’ ve «insuficiente» la propuesta de la Conselleria y cree que es «imprescindible restringir su acceso y uso en la educación obligatoria». Así lo ha confirmado en una entrevista con Efe Xavier Casanovas, que es uno de los portavoces de la iniciativa, que ha dicho que «es contradictorio» que haya un movimiento social muy amplio de familias contrarias al uso del teléfono móvil antes de los 16 años y que la conselleria no se alinea de manera clara con este mensaje.

Para el miembro del movimiento, la regulación de los móviles «no se puede dejar a merced de cada centro una decisión que debe ser clara y concisa en criterios de mínimos y recursos». Como agravante, Xavier Casanovas ha añadido que el hecho de no regular de manera explícita el uso de móviles «abre la puerta a desigualdades entre centros» ante una cuestión que hoy es «central en la vida educativa». Pese a verla «insuficiente», el portavoz ha dicho que la postura de la conselleria es «positiva» porque «avanza en la misma dirección» de las reivindicaciones del movimiento de familias, que reúne a más de 8.000 miembros en un canal de Telegram.

Xavier Casanovas ha subrayado que el objetivo de la iniciativa es «rebajar al máximo la presión social para comprar un móvil» a los niños a los 12 años, «cuando empiezan el instituto», y «romper una dinámica enquistada» que asume como «normal» la llegada del móvil con la finalización de la primaria. Para ello, persiguen «empoderar a las familias que quieren aplazar la llegada de los móviles a la vida de sus hijos» y que éstos «no sean los raros de la clase».

Según el portavoz, «restringir lo máximo posible» el uso del móvil «no está reñido con la educación digital», que «evidentemente, es muy necesaria», pero para la que «no hace falta que los niños lleven un móvil en el bolsillo». «Queremos querer seguir poniendo sobre la mesa y en la sociedad el discurso diferencial» ante el uso del móvil antes de los 16 años y «hacerlo de manera muy amplia, no sólo ante la conselleria», ha reconocido Casanovas, que ha anunciado que asistirán al pleno del Consell Escolar de Catalunya del próximo 16 de noviembre.

Para llevar a cabo sus objetivos, un total de 49 representantes de los más de 20 grupos territoriales de familias en los que se divide el grupo de Telegram empezarán a tener un contacto para desarrollar iniciativas a nivel territorial, ha dicho Casanovas. Entre las proyectos que tiene en cartera el grupo Adolescencia libre de móviles se encuentran una carta de compromiso de las familias ante el uso del móvil y una encuesta a nivel de Cataluña para ver cuál es la opinión de padres y madres ante el uso del móvil por parte de sus hijos entre los 12 y los 16 años.

Las familias también pretenden conseguir un compromiso a nivel de barrio o zona educativa porque «el problema se da en el paso de la primaria a la secundaria», sobretodo cuando «los niños tienen que cambiar de centro» para seguir la escolarización, ha añadido Xavier Casanovas.