La cooperación española para educación, en su nivel más bajo en 20 años
“Sin medidas adicionales, unos 84 millones de niños no recibirán educación”, según Pilar Orenes, representante de la Campaña Mundial por la Educación.
Durante un acto para celebrar el 20 aniversario de esta coalición, las cuatro ONG han expuesto además que la ayuda destinada a salud se disparó por la irrupción de la covid-19, pero la de educación ha bajado a nivel mundial de 2020 a 2021 a un 7%, el nivel más bajo desde 2015. Según la Unesco, esta falta de priorización en los presupuestos nacionales se traduce en un déficit mundial de financiación educativa de más de 100.000 millones de dólares. En el acto, la directora de Educo, Pilar Orenes, ha subrayado que pese a que los desafíos en materia educativa son grandes, es necesario «un mayor compromiso por parte de la comunidad de donantes. Porque la educación de calidad, equitativa e inclusiva cura y salva vidas”. “Necesitamos la implicación de todos los actores, la administración central, pero también la autonómica, la local, las empresas, la sociedad civil. Las alianzas son clave”, ha añadido.
Su valoración coincide con la actualización de los datos sobre financiación internacional en materia educativa que ha presentado la CME en el evento. En el caso de España, el análisis refleja que la cooperación española necesita redoblar esfuerzos y tener una financiación más robusta para contribuir de una manera más decidida a la ampliación del derecho a la educación en el mundo. «Un objetivo, que choca con los últimos datos recogidos por la Campaña, que indican cómo la ayuda española destinada a educación retrocedió en 2021 a su valor más bajo en 20 años, llegando a significar solamente el 7,4% del total», según la Campaña Mundial por la Educación, surgida en España en 2003, cuatro años después de su creación en el Foro Mundial por la Educación de Dakar.
Durante estos 20 años, la coalición liderada por Ayuda en Acción, Educo, Entreculturas y Plan International y formada por ONG, sindicatos del entorno educativo, centros escolares y movimientos sociales se ha constituido como una plataforma desde la cual coordinar y movilizar a la sociedad civil para reclamar una educación de calidad en todo el mundo.