¿Cómo trabajar la Biblia con peques?
Adaptar la Biblia para niños es el primer punto de partida. Sin embargo, debemos tener en cuenta muchos más factores a la hora de enseñarla a los más pequeños. En este artículo, abordamos cómo integrar la Biblia en las actividades de religión y cómo ayudar a los niños a conocerla.
La Biblia es fundamental para los niños: les educa en valores universales y promueve su espiritualidad. Existen muchas razones para tratar profundamente el texto sagrado en clase. Te explicamos las más importantes.
Enseñanza en valores
La Biblia enseña multitud de valores que son cruciales en la vida del niño. Hablamos de la solidaridad, de la empatía y de la generosidad. Además, es un libro sustancial para trabajar el amor propio, la autoestima y el respeto por uno mismo.
Fomento de la espiritualidad
La espiritualidad es una dimensión verdaderamente importante del ser humano. En los momentos difíciles, es una luz a la que aferrarse. Aparte, es capaz de sacar lo mejor de nosotros mismos. Inculcar a nuestros alumnos la importancia de cultivarla les dará herramientas para enfrentarse a los momentos oscuros de la vida.
Aprendizajes para la vida
La Biblia es un compendio de saberes muy útil para el crecimiento personal. Si el profesor es capaz de integrar el libro sagrado en el día a día del alumno, entonces este tendrá una gran herramienta de aprendizaje.
Existen dinámicas muy sencillas que nos pueden ayudar. Una de las más interesantes consiste en dedicar los primeros minutos de clase a ser conscientes del día. Para ello, podemos leer una frase de la Biblia con nuestros alumnos y reflexionar sobre ella. Es un hábito que no olvidarán.
Suscitar interés en los niños no es una tarea sencilla, aunque es cierto que a edades tempranas suelen ser más receptivos ante el aprendizaje. En este sentido, es importante incorporar herramientas docentes que nos permitan captar su atención y provocar inquietudes hacia la Biblia. A continuación, se explican algunos consejos útiles para el profesorado.
1. Escoge el momento adecuado
¿Cuándo están tus alumnos más receptivos? En algunas clases, las primeras horas del día son especialmente eficientes. Las aprovecharemos para trabajar la Biblia, que requiere mayor comprensión y concentración.
2. Haz que sea divertido
Existen diferentes situaciones de aprendizaje que puedes llevar a la práctica para enseñar la Biblia a los niños de forma divertida. En general, lo que se aprende jugando se integra mejor.
- Dibuja la Biblia: esta actividad consiste en leer con el alumnado un pasaje concreto. Después les invitamos a dibujarlo tal y como está en su imaginación.
- Continúa la historia: consiste en entregar a los niños las primeras líneas de un fragmento de la Biblia. Ellos tienen que escribir su propio final, que después se compara con el que está escrito en el libro sagrado.
- La frase del día: cada día de la semana, uno de los alumnos compartirá con sus compañeros una frase de la Biblia que haya escogido previamente en casa. Dedicaremos unos minutos a pensar e intercambiar ideas sobre la misma.
- El juego de la Biblia: ¿y si hacemos preguntas y respuestas con nuestros alumnos? Existen multitud de aplicaciones, como Goodnotes, que te permiten hacer fichas de preguntas y respuestas rápidamente. Después puedes proyectarlas en clase y jugar.
3. Establece dinámicas
Las dinámicas te ayudan a conectar con tus alumnos y son útiles en cualquier materia. Cuando tenemos que trabajar un libro sagrado tan profundo y complejo como la Biblia, son la mejor estrategia para hacerle llegar a nuestros alumnos su importancia.
Una de las dinámicas más divertidas es el pasaporte bíblico. Con él, los niños sabrán cuáles son las partes de la Biblia que vamos a trabajar y cómo. Puedes encontrar muchos en Internet o hacerlo tú mismo. Simplemente, establece las actividades y márcalas con un sello cuando el alumno termine cada una.
En este artículo, hemos hablado de cómo trabajar la Biblia y de la importancia que tiene que los niños la conozcan. No solo es una fuente de inspiración infinita, sino que también les ayudará en su día a día. Además, sirve para inculcar valores de gran importancia, como el respeto, la solidaridad o la empatía. ¿Qué consejos sigues tú para enseñar la Biblia a tus alumnos? ¿Cuáles son las estrategias que te han dado mejores resultados? Comparte tu experiencia con la comunidad de MAGISTERIO.