fbpx

Educación Emocional según el temperamento de los niños y niñas

Pax Dettoni (Antropóloga, experta en Educación Emocional y creadora de “En Sus Zapatos”. Directora de la Asociación Teatro de Conciencia).
En Sus ZapatosLunes, 2 de agosto de 2021
0

Para encontrar el origen del temperamento nos hemos de remontar 500 años a. C. en Grecia y en el ámbito de la salud. Fue entonces cuando Hipócrates, padre de la medicina, observó y definió que el ser humano estaba compuesto por cuatro humores (líquidos) que al encontrarse en armonía daban lugar a la salud o, a la enfermedad si por el contrario estaban en desarmonía.  Además, descubrió que estos cuatro humores, según su predisposición en cada cuerpo humano daban lugar a cuatro tipos de temperamento que determinaban el aspecto físico y psíquico de las personas.

Estos cuatro temperamentos eran el colérico (vinculado con el líquido de la bilis), el sanguíneo (vinculado con el líquido de la sangre), el melancólico (vinculado con el líquido de la bilis negra) y el flemático (vinculado con el líquido de la flema).  Estos no eran considerados buenos o malos, solo eran una forma de clasificar a las personas para tratarlas en la medicina. Sin embargo, cada uno de ellos tiene aspectos positivos y negativos. Por tanto, en términos de salud se trataba de fortalecer los positivos y evitar o transformar los negativos.

Cada niño o niña según su temperamento presentará desafíos emocionales diferentes, por tanto, las estrategias de gestión emocional que le sirven a uno, no serán útiles para el otro.

Después, durante muchos siglos, se siguió usando el abordaje de los cuatro temperamentos no solo en el ámbito de la salud, sino también en el ámbito de la psicología y por supuesto de la educación. Sin embargo, en la actualidad ha quedado casi en desuso esta antigua sabiduría. Por supuesto, hay excepciones, como la educación Waldorf que la tiene muy en cuenta a la hora de empezar el proceso de aprendizaje con los niños y niñas.

A pesar de que hoy en día no sea considerado tan relevante tener en cuenta los temperamentos de las personas, es importante remarcar que, dado que es sobre el temperamento que se construye el carácter y la personalidad, puede ser un abordaje muy útil en la educación de los más pequeños, y en particular en su educación emocional.

Educarles desde pequeños a que aprendan a identificar y gestionar sus emociones se hace de forma directa y también a través del modelaje por parte del adulto de referencia.

Para comprender hasta qué punto los temperamentos pueden regir las emociones y los comportamientos, os contaré una corta historia.

Cuatro niños, cada uno con un temperamento, se encuentran con una gran piedra en medio del camino por el que se hayan transitando.  El primer niño que tiene un temperamento colérico, delante de la piedra se enfada y busca un gran tronco y la rompe a golpes, después sigue su camino.  El segundo niño que tiene un temperamento sanguíneo, mira la piedra con entusiasmo y busca la manera de escalarla y la salta.  El tercer niño que tiene un temperamento melancólico, al ver la piedra tan grande se asusta y se entristece por no poder seguir andado y decide regresar a casa. Y por último, el cuarto niño que tiene un temperamento flemático, decide sentarse y pensar durante mucho rato y sin prisa, cuál es la mejor manera de cruzarla y acaba descubriendo que puede pasarla por uno de los lados.

Con este breve relato podemos ver como delante del mismo obstáculo cada uno de los temperamentos reacciona de diferente manera.  Y esto es lo mismo que podemos observar cuando estamos delante de un grupo de niños y niñas, que su tendencia natural de sentir y comportarse es diferente ante el mismo acontecimiento.  Por ello, no podemos tratarlos como si no lo fuera. Sobre todo, cuando queremos educar sus emociones, fundamentalmente porque cada niño o niña según su temperamento presentará desafíos emocionales diferentes, por tanto, las estrategias de gestión emocional que le sirven a uno, no serán útiles para el otro.

Por ejemplo, mientras que con el niño o la niña de temperamento colérico nos tendremos que centrar principalmente en ayudarle a identificar y gestionar su rabia, para el flemático esto no nos servirá de nada porque son niños que a duras penas se enfadan.

Es decir, cada temperamento significará un abordaje diferente en relación a la educación emocional. Por ello, no podremos pretender una educación estandarizada para todos los niños y niñas, ni en términos intelectuales, ni en términos emocionales.

No solo cada persona es un mundo, sino que también cada niño o niña lo es.  Educarles desde pequeños a que aprendan a identificar y gestionar sus emociones se hace de forma directa y también a través del modelaje por parte del adulto de referencia, que deberá saber que cada niño en función de su temperamento necesitara de unas estrategias o de otras.  Por tanto, si queremos dar inicio a un proceso de educación holístico de nuestros pequeños, el primer paso es observar su cuerpo y su comportamiento natural para definir cuál es su temperamento predominante.  Y es importante hacer este ejercicio con un profundo amor y lejos de cualquier tipo de juicio, una vez intuyamos qué temperamento tienen con más fuerza.

Educar es ante todo amar, y se ama lo que se conoce.  Conocer a nuestros niños y niñas pasa por observarles y adecuarse a ellos para que puedan acoger de forma natural la educación para desarrollar sus potencialidades, aceptar sus limitaciones, y fortalecer sus debilidades.

_______________________________________________________________________

En la Asociación Teatro de Conciencia contamos con la Escuela de Educación Emocional con Teatro de Conciencia. En septiembre comenzamos la segunda edición con el Curso de Educación Emocional con Teatro de Conciencia. Método “En Sus Zapatos”, en formato semipresencial, de 150 horas. Una formación del profesorado en educación emocional homologada con créditos del Ministerio de Educación y Formación Profesional del Gobierno de España. El plazo de inscripción de este curso online en educación emocional está abierto. (Puedes solicitar información escribiendo a info@teatrodeconciencia.org).

0
Comentarios