Animación de alta calidad en 3D

Catorce años después de que Toy Story dejara boquiabierto a medio mundo, acaba de llegar a las pantallas del cine la versión en 3D de la popular y pionera película de Pixar. Y si hablamos de innovación en tres dimensiones también hay que tener en cuenta a G-Force: Licencia para espiar, una aventura llena de acción protagonizada por… ¡cobayas!

Juguetes con marcha. ¿Dos juguetes que luchan por ser los favoritos de su dueño? ¿Un muñeco intergaláctico que tiene crisis de identidad? La historia de Toy Story es francamente original e inolvidable. Woody, un vaquero con sombrero y pistolas, ha sido siempre el juguete preferido del chaval Andy. Pero los tiempos cambian en las tiendas y se ha puesto de moda Buzz Lightyear, un muñeco futurista. Cuando Buzz se convierte en la nueva y más preciada posesión de Andy, el cowboy Woody queda desolado y triste, y recibe el consuelo de los otros juguetes. Por otra parte, Buzz, además de mostrarse muy egoísta y autosuficiente, no sabe que es un juguete y piensa que es realmente un hombre del espacio… Las cosas cambiarán cuando descubra poco a poco su verdadera identidad y necesite la ayuda de sus compañeros. La acción, las sorpresas y los golpes de humor son constantes en este film lleno de valores, como la amistad, el compañerismo y la aceptación de uno mismo.

Juguetes con marcha

¿Dos juguetes que luchan por ser los favoritos de su dueño? ¿Un muñeco intergaláctico que tiene crisis de identidad? La historia de Toy Story es francamente original e inolvidable. Woody, un vaquero con sombrero y pistolas, ha sido siempre el juguete preferido del chaval Andy. Pero los tiempos cambian en las tiendas y se ha puesto de moda Buzz Lightyear, un muñeco futurista. Cuando Buzz se convierte en la nueva y más preciada posesión de Andy, el cowboy Woody queda desolado y triste, y recibe el consuelo de los otros juguetes. Por otra parte, Buzz, además de mostrarse muy egoísta y autosuficiente, no sabe que es un juguete y piensa que es realmente un hombre del espacio… Las cosas cambiarán cuando descubra poco a poco su verdadera identidad y necesite la ayuda de sus compañeros. La acción, las sorpresas y los golpes de humor son constantes en este film lleno de valores, como la amistad, el compañerismo y la aceptación de uno mismo.

 

La revolución de la animación digital

En 1995 la película Toy Story lo cambió todo. Fue la primera película de la historia hecha íntegramente con tecnología digital, y gracias a la aventura de Woody y sus amigos el ordenador dejó de ser una máquina inhumana para los creadores y se convirtió en un extraordinario instrumento para producir arte, para emocionar y para hacernos soñar. Pero las cosas hubieran tomado otro camino muy diferente si todos los esfuerzos se hubieran centrado únicamente en la avanzada y sorprendente tecnología… Por fortuna, detrás del audaz proyecto había un hombre que tenía ideas muy claras y distintas respecto hacia dónde debía encaminarse la tarea. El máximo responsable de la película, John Lasseter, sabía que el secreto del éxito estaría en el guión, en la historia que se iba a contar. Se debían elaborar guiones ingeniosos, divertidos y a la vez profundos, que aportaran valores positivos al espectador. Y eso es lo que hizo con esta primera película de su recién creada empresa de animación, denominada con mucho acierto Pixar.

Ahora, a la vuelta de casi 15 años, cuando la Compañía Pixar ya ha dado muestras de su enorme talento con un formidable elenco de películas, es cuando se ha producido otro nuevo salto tecnológico: un nuevo tratamiento de las tres dimensiones. Y han decidido con mucho acierto transformar al 3D su primera película, quien sabe si como primer escalón hacia la transformación a ese formato de sus anteriores filmes de dos dimensiones. Lo que está claro es que Toy Stoy 3D es un aperitivo para lo que está por venir, pues seguramente todas las demás películas de aquí en adelante lleguen ya en ese formato, como ya hemos podido comprobar este verano con Up y como lo haremos sin duda con Toy Story 3, cuyo estreno está previsto para la primavera de 2010.

 

Cobayas a lo James Bond

G-Force supone el debut como director del oscarizado y experto en efectos especiales Hoyt Yeatman. El debutante cuenta con el respaldo del famoso productor Jerry Bruckheimer (Piratas del Caribe), en la que es su primera película en 3D. Y la verdad es que el equipo técnico ha echado el resto, de modo que la película gana mucho cuando se ve en este formato.

¿Pero qué son los G-Force? Muy sencillo: un comando especial de agentes de la ley. Lo raro es que se trata de un comando formado por tres cobayas y un topo. Han sido entrenados por el gobierno y son tan efectivos o más que cualquier ser humano. El problema es que los fondos que les mantienen corren peligro, porque los nuevos jefes gubernamentales creen que los G-Force no sirven para nada. Esto sucede justo cuando el comando especial descubre un maquiavélico plan para acabar con el mundo.

Estamos ante una película muy familiar, divertida, llena de acción y diversión, que gustará a todos los públicos. Es genial, especialmente, ver a los animales en acción. Y es que ellos son los auténticos protagonistas de la historia. Hechos por ordenador, son un auténtico lujo visual. Los movimientos precisos y casi ilimitados que realizan y las diferentes texturas que tienen los pelos que envuelven su cuerpo, los convierten en virguerías animadas. Pero más allá de las modernidades –también presentes en el giro final que ofrece el guión-, G-Force cumple con los parámetros de este tipo de películas especialmente dirigidas a los más pequeños. El contenido es abundante en valores positivos y ofrece lecciones valiosas como la importancia de la confianza en uno mismo y en los demás, así como del trabajo en equipo.

 

Detrás del telón

El hombre responsable de que miles de personas puedan disfrutar de las creaciones de la compañía Pixar se llama John Lasseter. Nacido en Los Ángeles en 1957, Lasseter revolucionó el mundo de la animación en 1995 con la creación de la aventura protagonizada por Woody y Buzz Lightyear. Así lo reconoció la Academia de Hollywood, cuando otorgó un Oscar especial a John Lesseter, por su aportación e inspiración tecnológica que había hecho capaz la animación digital. Además la película recibió otras tres nominaciones a la dorada estatuilla.

Pero John Lasseter tiene claro su propósito y el papel real que juegan los ordenadores: «Mucha gente sigue con la idea de que hago una película sentándome frente al ordenador y tecleando la orden ¡hazme una película con emociones, sentimientos y personajes creíbles! y que luego le doy a tecla de retorno y ya está. Mis filmes están hechos a mano por 400 artistas que disponen del ordenador como una herramienta más.»

Y respecto al enfoque de sus películas dice: «Hacemos las películas que nos gustan. Es decir, el tipo de películas que nos gustaría ir a ver. Las películas que más me gustan son las que me hacen reír hasta las lágrimas, y que me conmueven al mismo tiempo. A mí me no me da vergüenza llorar en el cine. Me influyó mucho Frank Capra y la forma en que sus trabajos te llegaban al corazón y te emocionaban.»

Slow Parenting. Educar a fuego lento

Del colegio a la academia de alemán. Y de allí, a la pista de tenis. Cuando llegan a casa, el descanso se llama televisión o consola. Todos los días. Todos los años de una infancia desvirtuada. ¿De verdad es esto lo que queremos para nuestros hijos? El movimiento slow parenting plantea una alternativa.

RODRIGO SANTODOMINGO

 

 

Un segundo de lucidez en su borrachera de paternidad cronometrada. Algo así tuvo hace unos años Carl Honoré mientras hojeaba un libro de microcuentos para dormir a los niños en sólo un minuto. “Gran idea, me lo compro”, fue su primera reacción. Y entonces vio la luz. ¿Arañar tiempo a uno de esos instantes mágicos en las relaciones con nuestros hijos? ¿Gran idea? Vaya locura…

Autor de Elogio de la lentitud y Bajo Presión, Honoré se ha convertido en la cabeza visible del slow parenting, un movimiento que aboga por que la aventura de educar evoque un plácido paseo en bicicleta y no una frenética carrera de bólidos en circuito urbano. Padres pausados, calma parental, paternidad a fuego lento. La traducción es lo de menos; lo importante pasa por saber formularse un par de preguntas esenciales. ¿Cuánto tiempo (de calidad, sin el yugo del estrés o la irritación) dedico a mis hijos? ¿Les trato como a verdaderos niños o como al proyecto de adulto que a mí me gustaría que un día fuesen?

Ingrediente básico de la receta slow: menos actividades extraescolares y más corretear por el parque. “Los niños necesitan jugar mucho, preferentemente en espacios abiertos en los que puedan moverse a sus anchas, imaginar, dar rienda suelta a su energía”, afirma María Novo, presidenta en España de la Asociación Slow People. A la hora de planificar el horario no lectivo del chaval, “la vía media es la adecuada”, añade Novo. Moderación cuantitativa y “aconsejar” en vez de imponer en la elección de la actividad concreta.

Suena paradójico. María Celeste Meana ha abierto en Buenos Aires (Argentina) D-Spacito, un centro “de recreación slow” que ofrece teatro, música o dibujo para niños. Amplia oferta de extraescolares bajo el amparo de una corriente que nos insta a reducir su dosis. ¿Cómo se resuelve esta contradicción de términos? En que su propuesta “está dirigida  desde lo lúdico, sin las obligaciones y presiones” inherentes a otros enfoques “que siempre tienen un objetivo académico”.

 

¿ABURRIDOS?

Otra máxima: dieta estricta de cachivaches electrónicos. Imaginación al poder. La alternativa al violín o al kárate no son la tele-niñera o el ordenador, “herramientas rápidas y fáciles de entretener” en palabras de Meana. También resulta conveniente racionar el arsenal de juguetes ultra-sofisticados que adormecen el ingenio o aquellos en los que la competición marca la pauta.

Llegado el caso, no hay que “tener miedo de que los niños se aburran”, asegura la responsable de D-Spacito. Ya se las apañarán ellos para convertir el sofá del salón en barco pirata o un puñado de piedras en familia numerosa. Según Novo, no debemos “olvidar dos cosas: a los niños les gusta estar con otros niños e inventarse ellos sus juegos”.

Inevitablemente, adoptar un nuevo modelo de paternidad implica renuncias, sobre todo en el campo profesional. Como dice la presidenta de Slow People España, “no podemos enseñar a nuestros hijos algo que nosotros no practiquemos. En la medida de lo posible, es conveniente trabajar menos horas y poder atenderles mejor, aunque disminuya algo nuestra disponibilidad económica. Recuerdo una postal que encontré en una pequeña tienda inglesa. Decía así: ‘a los ojos de un niño, el amor se llama tiempo’”.

 

-La tele mató a la infancia

El secreto, el misterio, la inocencia. En 1979, el sociólogo estadounidense Neil Postman escribió «La desaparición de la infancia» para denunciar que dichos conceptos, estrechamente unidos a la idea de niñez, estaban siendo erosionados por la omnipresencia de la televisión. Un medio que, con su constante bombardeo de noticias y mensajes comerciales, había difuminado los contornos que separan al mundo adulto del infantil. Un pasaje resume su tesis: “(con la televisión) a los niños se les ofrecen respuestas a preguntas que nunca hicieron”.

Ya en la década de los 90, Postman (que falleció en 2003) pudo comprobar cómo otros fenómenos contemporáneos no hacían sino confirmar lo profético del título de su obra. El sociólogo criticó con dureza la figura del padre sobreprotector que aspira a controlar con exceso de celo la vida de sus hijos. «¿Por qué los niños ya no se divierten solos, sin supervisión paterna?», se preguntaba en una entrevista concedida en 1994. Postman también tuvo tiempo para lanzar dardos contra el nuevo sustrato competitivo del juego deportivo (organizado, claro está, por los padres) o la manía de vestir a los hijos como reproducciones en miniatura de un adulto casual.

La conciliación con apellido masculino

Cuando pones sobre la mesa de debate el tema del reparto de tareas y de conciliación vida laboral y personal, surge la polémica. Los hombres piensan en la conciliación que a ellos les conviene, y ellas en la doble vida que llevan, rindiendo al 100% en la empresa y al 100% en casa. Un desajuste que se está produciendo desde la incorporación de la mujer al trabajo y que se ha resuelto con dosis vitamínicas para ellas: la conciliación. Un modelo que supone dar vitaminas para que puedan sobrellevar mejor la doble carga de trabajo.

En una empresa de Madrid propusieron una medida de conciliación dirigida a toda la masa de trabajadores. Porque quede clara una cosa, la conciliación se dirige indistintamente a hombres y mujeres. Se propuso que la entrada al trabajo pudiese ser flexible: desde las 08:00 a las 10:00, para poder salir igualmente de forma escalonada: de 16:00 a 18:00 h. Un año después, los trabajadores que entraban a las 08:00h eran el 100% mujeres, y los de las 10:00 todo hombres. Las mujeres para conciliar su vida “personal” con la familia, y los hombres con su vida “personal” aparte de la familia.

En una empresa de Madrid propusieron una medida de conciliación dirigida a toda la masa de trabajadores. Porque quede clara una cosa, la conciliación se dirige indistintamente a hombres y mujeres. Se propuso que la entrada al trabajo pudiese ser flexible: desde las 08:00 a las 10:00, para poder salir igualmente de forma escalonada: de 16:00 a 18:00 h. Un año después, los trabajadores que entraban a las 08:00h eran el 100% mujeres, y los de las 10:00 todo hombres. Las mujeres para conciliar su vida “personal” con la familia, y los hombres con su vida “personal” aparte de la familia.

El objetivo de estabilidad personal y emocional de la mujer, que ha buscado la conciliacion actual, lo único que ha conseguido es desestabilizar más a la mujer y, por tanto, al hombre. La conciliación, a la que no se le debería poner apellido alguno, ciertamente sí lo tiene, y se llama mujer.

Sólo concilian un 5% de los hombres. Ya no se trata de intercambiar papeles sino de que las mujeres tengan la oportunidad de negociar con los hombres la posibilidad de tomar un camino u otro. La conciliación, que es un mensaje creado para las mujeres y reivindicado por ellas, debe convertirse, para conseguir la estabilidad que la sociedad anhela, en conciliación masculina.

Un cambio de foco en el mensaje y un cambio de mentalidad entre los hombres. Que no se entienda la Conciliación Masculina como un intercambio de papeles donde el hombre debe suplantar la figura maternal.

La Conciliación Masculina persigue los mismos objetivos que la conciliación busca pero con la involucración del hombre en el mismo porcentaje que la mujer. ¿No es acaso el hombre partícipe del rol familiar? ¿No es el hombre parte de la pareja? ¿No tiene el hombre-empresario una obligación social frente a la estabilidad de sus empleados?

 

DAVID SURIOL y MIGUEL JANER, consultores de Lifec.

 

Más información: Desestabilización social

Los niños nunca van solos al cole

Los niños madrileños son los que más mayores (10,9 años) van solos al colegio, mientras que los gallegos son quienes lo hacen a una edad más temprana (8,2 años). Una cuarta parte de los padres no saben cuando dejarán que sus hijos no lleven compañía, aunque la media para ir solo a la escuela se sitúa en los 12,6 años.

ESMERALDA MARDOMINGO

En España, nueve de cada diez niños van al colegio en el mismo núcleo urbano en el que residen. Poco más de la mitad (59%)van andando y un 40% en coche, según un estudio pionero sobre los niños, las ciudades y la seguridad vial realizado por Attitudes.

Pero lo más llamativo de esta investigación es que el 70% de los niños, de 8 a 12 años, nunca van solos al colegio ya que siempre lo hacen en compañía de alguien (en el 77% de los casos por los propios padres). No hay que olvidar que la excesiva dependencia de los progenitores entorpece el aprendizaje de la autonomía vial y del desarrollo psicosocial de los niños.

 

HÁBITOS DE DESPLAZAMIENTO

Los principales motivos para que los niños no vayan solos son la seguridad, la tranquilidad de los padres y la distancia. Curiosamente estos dos últimos factores también son los motivos que llevan a los padres a dejar que sus hijos habitualmente vayan solos al colegio.

Entre los que afirman que sus niños van al colegio en autobús escolar, un 42% declara que el autocar no dispone de cinturones de seguridad, un 27% que sí los tiene, un 8% que algunos sí pero otros no y un 23% afirma desconocer esta cuestión.

La edad media en la que los escolares comienzan a ir solos al colegio en España es a los 9,4 años. A medida que aumenta el número de habitantes de la localidad en la que viven, también lo hace la edad del niño para desplazarse solo a su colegio. En municipios pequeños es más habitual que los niños jueguen en la calle, vayan en bicicleta o patinete y acudan a casa de sus abuelos en un entorno próximo a su domicilio; mientras que en los municipios grandes, la actividad que más destaca es la de ir a actividades extraescolares.

Precisamente otra de las sorprendentes conclusiones del estudio de Attitudes señala que hay un 19% de niños que nunca juega en la calle y un 20% que nunca monta en bicicleta o en patinete.

Respecto a la seguridad, el 69% de los niños consultadas se siente seguro cuando camina por su pueblo o ciudad, un 13% no se siente seguro y el 18% restante afirma que solo se siente seguro a veces. Entre los motivos por los que los niños se sienten seguros destacan el hecho de ir siempre acompañado, el conocimiento de la gente del pueblo y del propio municipio. Por el contrario, los vehículos y la gente desconocida o rara son los aspectos que producen inseguridad, ya sea siempre o algunas veces; mientras que el hecho de ir acompañado es el otro aspecto que destacan los niños que no siempre se sienten seguros.

 

PADRES HELICÓPTERO

Lenore Skenazy fue bautizada por los medios de comunicación norteamericanos como “la peor madre de América” por permitir que su hijo Izzy, de 9 años de edad, se trasladara solo por el metro de Nueva York para ir al colegio en un país como EEUU donde apenas el 10% de los niños van solos a la escuela. A raíz de esta experiencia personal fundó el movimiento de los Free Range Kids (Hijos en libertad) que reclaman la exploración, la aventura y la imaginación como el territorio natural de la infancia. Lenore Skenazy forma parte de una nueva tendencia que está en pleno debate en Estados Unidos y que cuestiona la obsesión y perfeccionismo de los padres con la educación de sus hijos. Es lo que los expertos denominan “padres helicóptero” o “hiperpapás”.

 

Familias en acción

Una familia unida y que se quiere es siempre un beneficio para la sociedad. Pero, además, ese beneficio puede ser aún más concreto si padres e hijos se implican en una actividad de voluntariado, que potencie los lazos familiares al tiempo que se ayuda a los demás. Y aunque el voluntariado familiar aún no es demasiado frecuente en España, cada vez son más las familias que luchan, todos a una, por un mundo más justo.

José antonio méndez

El genial escritor británico Gilbert K. Chesterton decía: “El lugar donde nacen los niños y mueren los hombres, donde la libertad y el amor florecen, no es una oficina ni un comercio ni una fábrica. Ahí veo yo la importancia de la familia”. Y no le faltaba razón. Precisamente por eso, porque la familia es el nido de los valores más importantes para la vida, la solidaridad no debe quedar a un lado, ni únicamente reducida a las relaciones intra-familiares. Bien lo saben todos aquellos padres que, de la mano de sus hijos, se lanzan a la acción a través del voluntariado familiar; una actividad poco frecuente en España pero que cuenta con un creciente número de seguidores.

Para los que aún no saben en qué consiste esta forma de ejercer la caridad bien entendida, desde la Plataforma de Voluntariado de España aseguran que se trata de “una forma de hacer participar a quien cree que no puede, de dar una vía para sensibilizar y educar en valores a menores, de dar un espacio de ocio distinto (alejado de centros comerciales y cercano a realidades sociales) a las madres y a los padres, y de dar posibilidades a quien ha sido voluntaria o voluntario y ahora es madre o padre –sin mucha posibilidad, por tanto, de liberar el tiempo– para llegar a muchas más personas”. Es decir, un camino, como otro cualquiera, para vivir la solidaridad.

 

VOLUNTARIADO

Como cada familia es un mundo, la misma Plataforma, en su web, reconoce que “vías para llevar a cabo el voluntariado familiar hay muchas: algunas organizaciones plantean programas puntuales de acercamiento a alguna realidad, en la que dan espacios para participar en familia (por ejemplo, una cena de navidad en un comedor para personas mayores) y otras se plantean una actividad de voluntariado continuada, en la que uno de los miembros adultos de la familia es el responsable o el voluntario, y el resto tienen posibilidad de acompañar en esta actividad (por ejemplo, ocio con menores de tres años que viven en cárceles con sus madres)”. Y dan más ideas para educar solidariamente: limpieza de bosques y parques naturales; ocio con menores en riesgo de exclusión; lecturas o juegos con personas mayores; ir a la piscina con personas que sufran alguna discapacidad; hacer pequeñas reformas en casas de acogida; pasear a perros que viven en albergues; ayudar en el banco de alimentos o en alguna sede de Cáritas…

Quienes han probado esta experiencia lo recomiendan sin pensarlo. Por ejemplo, la Fundación Padre Garralda, y su ONG Horizontes abiertos, especializadas en la atención (a distintos niveles) de presos y sus familiares, tienen un programa en el que pueden participar los padres con sus hijos. Se trata del programa Kostka, “dirigido a los menores de 3 años que viven en las cárceles porque sus madres están cumpliendo condena”, explican desde la Fundación. Así, los niños que acuden con su familia juegan y se relacionan con los menores cuya infancia transcurre tras los muros de una prisión, por muy infantilmente que estén adornados. Eso supone que los pequeños “pueden tener acceso a un ambiente normalizado, y a un desarrollo formativo y personal acorde con su edad”. Entretanto, los adultos acompañan, apoyan, escuchan y crean lazos de amistad con las madres que cumplen condena.

Con otro enfoque radicalmente distinto, pero siempre solidario, la Fundación Natura tiene actividades al aire libre para familias, en la que los pequeños ayudan a sus padres a plantar árboles, limpiar bosques, cuidar de la flora y de la fauna, y aprender a identificar los animales y plantas que les rodean. Un día de campo que va más allá del pic-nic. Y, si de comida se trata, la ONG SED lleva a cabo un programa en voluntariado entre las familias y las escuelas, que, entre otras actividades propone colaborar con el Banco de Alimentos, ya sea aportando comida, ya sea ayudando a seleccionarla, distribuirla o canalizarla. Y en estos tiempos de crisis, no falta quien necesite de esa ayuda.

Tampoco les sobran las ayudas a los niños que sufren alguna discapacidad. Para ellos, la Fundación San Patricio ha organizado un programa de voluntariado con familias, en las que, una vez cada 15 días, la familia de voluntarios recoge al menor discapacitado, y pasan la mañana juntos, en compañía de otras familias que realizan la misma actividad, coordinadas por la Fundación. Así, en una misma mañana, unos y otros comparten los juegos, los mimos, los cuidados y, cómo no, la amistad y el cariño más solidarios.

 

UNA NAVIDAD ESPECIAL

La Navidad es un buen momento para acercarse al voluntariado familiar. No para lavar la conciencia, sino para aprovechar los días de vacaciones en volcarse a los demás. Los comedores de las Hijas de la Caridad sirven cenas especiales en estas fechas, y los padres pueden acercarse con sus hijos adolescentes a servir, a cantar villancicos o a charlar con los indigentes y enfermos terminales a quienes atienden las religiosas de la Madre Teresa. Y abundan las residencias de mayores y los hospitales donde estos días se reciben a grupos organizados (también a familias) para cantar, representar alguna obra de teatro y, sobre todo, acompañar a quienes están más solos. No por lástima, sino por amor al prójimo.

Otra forma de darle la vuelta a la tortilla navideña la proponen desde Setem. Marta Isabel García recomienda visitar las tiendas de comercio justo acompañados por los hijos, para explicarles qué es el comercio justo, cómo viven en otros países y elegir, por qué no, los juguetes que vamos a pedirles a los Reyes Magos: “Para elegir y comprar los regalos y la cesta de Navidad, es mejor dirigirse a tiendas de Comercio Justo llevadas por ONGs (Intermon, Setem y Cáritas, entre otras) ya que en su producción y uso se respetan más el entorno y a las personas que los usan y fabrican. Los juguetes de Setem, por ejemplo, proceden de países del Sur y son los propios de sus culturas, hechos de forma artesanal. El Comercio Justo establece unas condiciones de producción y comercialización más equitativas para los productores, y si los padres vienen a la tienda con sus hijos, pueden explicarles todo esto y cambiar el consumismo por solidaridad”. Como se ve, propuestas no faltan. Ahora sólo queda que usted y su familia den un paso al frente y se apliquen esta cita del mismo autor que principiaba este reportaje: “La edad de oro retorna a los hombres cuando, aunque sólo sea momentáneamente, se olvidan del oro”.

 

Más información: La familia sostenible

Y a ti, ¿qué te van a traer los Reyes?

Brillan los ojos y las mejillas se cubren de inquietud. Las sonrisas se funden en bocas abiertas por el asombro, y en el pecho se disparan mil caballos al galope de la ilusión. Son los efectos de la noche de Reyes que este año traerán, a niños y mayores, un nuevo cargamento de ensueños, fantasías…, y juguetes, claro. Porque aunque los más pequeños no entienden de modas, Sus Majestades saben adaptar el presupuesto a la época de crisis, sin dejar por ello de acercar a los niños las últimas novedades del mercado. Y a ti, ¿qué te van a traer los Reyes este año?

José Antonio Méndez

No hay ni un solo niño en España que no sepa que, el mejor de los regalos de todos cuantos traen los Reyes Magos, es la emoción de saber que van a venir. Y quien no lo crea así, que observe la cara de los niños (¡y de los mayores!) en la tarde del día 5 de enero, en cualquiera de las cabalgatas con las que Sus Majestades recorren nuestro país de punta a punta.

Melchor, Gaspar y Baltasar, con su séquito de pajes, carteros reales, camellos y ayudantes, se cuelan cada año en nuestras casas para dejarnos un cargamento de juegos, regalos y, sobre todo, de ilusión. Y como vienen de Oriente, hay que facilitarles el trabajo eligiendo desde ya nuestros juguetes favoritos y escribiendo la tradicional carta a los Reyes. En la que este año –dicen las empresas jugueteras– figurarán los juguetes de toda la vida, adaptados al siglo XXI.

 

UN NIÑO ES UN NIÑO

Cuando los Magos de Oriente lleguen a nuestro país, buscarán los juguetes demandados por los más pequeños en los catálogos de las 217 empresas que conforman el sector juguetero en España. Y harán parada especial en el llamado “Valle del Juguete”, todo un paraíso para los niños situado entre las localidades alicantinas de Ibi, Onil, Tibi, Biar y Castalla, donde se produce casi el 40% de los que amanecerán el 6 de enero en nuestras casas.

Estas fábricas de ilusión y magia trabajan sin descanso desde hace meses para atender a la inmensa demanda que llega con cada Navidad; y que este año tiene el sabor de los juguetes de siempre, porque un niño, siempre es un niño. José Antonio Pastor, presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ) asegura que este año “vuelve el juguete de toda la vida, pero renovado, con el fin de adaptarse a las exigencias de los pequeños”. Además, Pastor afirma que, dado que la crisis ha hecho mella en el bolsillo de Sus Majestades, “el consumidor tiende a hacer un uso más racional del presupuesto, por lo que el sector trata de adaptarse y hacer un esfuerzo por reestructurar la oferta, creando juguetes con un aire tradicional, más básicos y pequeños, y que suponen un ahorro”.

 

PELUCHES QUE CANTAN

Eso sí, aunque desde la AEFJ se asegura que “la esencia del juguete tradicional sigue manteniéndose en las preferencias de los niños”, los juguetes de hoy incorporan “características como la tecnología o la faceta interactiva, que permiten que el clásico de siempre se adapte a nuestra sociedad”. Un par de ejemplos. Los peluches, que velan el sueño de miles de niños, ahora, además, cantan canciones para que el pequeño se quede dormido. “Cinco lobitos”, “Estaba la pastora”, “Cucú cantaba la rana” o “La reina Berengüela” son algunas de las canciones tradicionales que peluches como La Pequeña Mandarina, de Diset, entonarán para tener dulces sueños (mucho más dulces si padres e hijos cantan juntos). Los coches también se modernizan: los Tech Deck, de Bizak, tienen su propia versión tuning para las carreras. Y así, con cada género de juguetes, entre los que, todo sea dicho, se llevan la palma las muñecas, que en sus múltiples versiones son los regalos más demandados y que mejor se adaptan al signo de los tiempos.

 

CONSEJOS PRÁCTICOS

Una cosa es segura: los Reyes Magos siempre saben lo que los niños quieren… aunque no siempre lo que necesitan. Y encima, como los peques suelen dejar las cartas para última hora, no siempre encuentran el juguete reclamado.

En 2008, por ejemplo, el 40% de los juguetes vendidos se adquirieron en la campaña de Navidad, y el 15% sólo en las dos semanas anteriores al 5 de enero. Por eso, para ayudar a Sus Majestades, la AEFJ propone una serie de consejos. “Los juguetes –dicen desde la Asociación– tienen algo en común para todos los niños: su función primordial es divertir y entretener; pero debemos tener en cuenta las siguientes consideraciones, según el niño, y la finalidad del juego: primero, las necesidades y preferencias que el niño transmita; segundo, la madurez intelectual del pequeño, su fuerza física o su habilidad manual; tercero, las características propias de los juegos, esto es, si son para utilizar en solitario o en grupo, si sirven para fomentar el sentido de la competencia, de la interacción o de la solidaridad, etc.; y cuarto, tener en cuenta las capacidades que se deseen potenciar en el niño”. Para este último punto, puede resultar muy útil: www.ludomecum.com, promovida por la Fundación Crecer Jugando, y que cuenta con la base de datos más completa y especializada en juegos y juguetes educativos (incluso algunos específicos para niños con discapacidades), para el auxilio de padres, maestros y educadores.

 

APOSTAR POR LOS CLÁSICOS

Si aún con todos estos consejos, Melchor, Gaspar y Baltasar tienen problemas para decidirse por un juguete u otro, lo mejor es apostar por los clásicos de toda la vida. La AEFJ reconoce que, en lo que llevamos de 2009, los productos más vendidos han sido las muñecas (13,7%), las figuras de acción con accesorios (11,3%) y los vehículos (10,2%). Y puesto que la media de gasto por niño, dicen desde la AEFJ, se situará en 166 euros, se pueden encargar a Sus Majestades no pocos de esos juegos clásicos, aunque renovados, como el nuevo Monopoly España, los Playmobil de la línea Egipto o los mil y un peluches de Barrio Sésamo que siguen haciendo felices a miles de niños.

Aunque, por supuesto, aprovechando los días de Navidad puede solicitar a los Magos el regalo que más beneficiará a sus hijos: pasar tiempo juntos, vivir la verdadera esencia de las fiestas de la Natividad y comprometerse a dedicarle más tiempo a su familia en 2010. Seguro que los Reyes están deseando cargar sus camellos con un regalo como éste.

 

LOS MAGOS GANAN A PAPÁ NOËL

Aunque Sus Majestades han notado la crisis económica, están dispuestos a echar el resto en esta Navidad. Así se desprende del “Informe Chicco sobre la Infancia y la Maternidad en España-2009”, en el que, entre otras cosas, se recoge que el 54% de las familias españolas gastará lo mismo que en 2008. Eso sí: a pesar de este sobre esfuerzo, uno de cada tres hogares reducirá el gasto para este año, por lo que los Reyes habrán de apretarse sus reales cinturones. Además, el mismo informe reconoce que Melchor, Gaspar y Baltasar le ganan la batalla a Papá Noel: 7 de cada 10 madres, de entre 18 y 45 años, manifiesta su intención de mantener la tradición de los Reyes, frente a sólo 3 que se decantan por la versión más popular de San Nicolás. Por Comunidades, Andalucía es la Autonomía más apegada a la visita de Sus Majestades (el 81% de los hogares); Cataluña la que más ventanas abre a Papá Noel (22,5% de las casas) y la Comunidad Valenciana es el único lugar en el que la presencia del gordinflón centroeuropeo ha descendido en las últimas décadas.

La mesa y el mantel hacen familia

Un estudio revela la importancia de que la familia coma unida en casa. Pese a las dificultades que plantea el estilo de vida actual, los españoles reconocen los valores que se cuecen alrededor de la mesa del comedor y se niegan a perderlos.

La mesa puesta, la hora de siempre, el ruido, el olor… Los servilleteros marcan el lugar y la jerarquía. De un metal vagamente parecido a la plata y con algún arabesco, los de papá y mamá; de colores, los nuestros. Y, por fin, ya todos alrededor de la mesa, la guerra por las empanadillas y la palabra, el cruce de conversaciones tan o más sustanciosas que el contenido de los platos: las manías arbitrarias de jefes y profesores, la subida de los precios, la última fechoría del gamberro oficial de 6º de Primaria… La vida.

Ángel recuerda las comidas de su infancia y adolescencia, hasta que el trabajo, la independencia y la madurez le hicieron marcharse a otras tierras, a otros cocidos. “Ahora no es tan fácil organizarse en ese sentido, pero yo tengo claro que en cuanto mis hijos tengan edad voy a intentarlo, aunque tenga que hacer eso tan poco ‘operativo’ de partir la jornada laboral”, dice.

La intuición que la nostalgia le regala a Ángel tiene, además, una base científica. El estudio “Cada comida es una oportunidad”, patrocinado por Knorr, una de las marcas de alimentación de Unilever, ha analizado el asunto en más de 15 países, incluyendo España. La conclusión general coincide con las sensaciones de Ángel, pero los detalles ayudan a comprender el porqué de éstas.

 

APRENDER Y COMER SANO

Muchas de las palabras que aprenden los niños, por ejemplo, las escuchan en la mesa: de cada dos mil nuevas palabras que un niño agrega a su vocabulario, mil las escuchó por primera vez en la mesa familiar. Además, se ha comprobado que los niños que comen en compañía con regularidad suelen tener mayor autoestima y acuden más motivados al colegio.

Y la salud emocional del núcleo también mejora: las parejas que comen más veces juntas, fortalecen su relación. Por no hablar de los valores nutricionales: lo niños que comen con sus padres consumen más verduras y frutas, ingieren menos alimentos fritos, grasas saturadas y grasas trans que los demás.

Jesús Contreras, catedrático de la Universidad de Barcelona especializado en antropología de la alimentación, apunta que, “culturalmente, en España y en muchos otros países comer es un ritual social e implica necesariamente comer en compañía”. El informe incide en cómo este tipo de comidas promueve la autoestima y el bienestar debido a las conexiones emocionales que se forjan con el transcurso del tiempo: “A la hora de comer, la gente se llama por el sobrenombre, se hacen chistes y comentarios intimistas que consolidan el vínculo familiar. Con el paso del tiempo, estas interacciones repetitivas crean un sentido de pertenencia personal y una identidad de grupo”.

 

MEJOR, SI ES EN CASA

Unos valores que, pese a la dificultad añadida que indiscutiblemente traen los nuevos tiempos, se resiste a desaparecer. Jesús Contreras, que también dirige el Observatorio de la Alimentación, niega las posturas catastrofistas: “En términos generales, se considera que nuestros comportamientos alimentarios actuales están desestructurados, se cocina menos, se come ‘de cualquier manera’… En definitiva, que comemos peor que hace unos años o que tradicionalmente.

Y, sin embargo, el estudio de Knorr muestra que, al menos desde el punto de vista de las actitudes, de las prácticas y de los valores declarados, no es tan grande la desestructuración”. En este sentido, las encuestas indican que hoy en día no se cocina tan poco como pudiera pensarse, ya que siete de cada 10 entrevistados declaran que lo hacen en su hogar, y a seis de cada 10, además, les gusta cocinar; se come más frecuentemente en la mesa que fuera de ella y en familia que en solitario, y ocho de cada 10 individuos comen, al menos, tres raciones de verduras y frutas al día.

Podría objetarse que las respuestas son más voluntaristas que reales. Pero incluso en es caso, insiste Contreras, “nos estarían poniendo de manifiesto una cierta realidad: la que refiere a las prácticas deseadas, esperadas, positivamente valoradas… Nos están reflejando cuáles son los ideales alimentarios de los españoles y españolas así como los beneficios individuales y sociales que se derivarían del seguimiento de esos ideales”.

 

ACTIVIDADES QUE SE REALIZAN DURANTE LA COMIDA PRINCIPAL

– Las actividades que se realizan con más frecuencia durante la comida principal en un día laborable son hablar con los otros miembros y compartir la comida (56,2%), disfrutar de la comida (51,3%) y mirar la televisión, escuchar la radio o leer la prensa (30,6%).

– Por el contrario, los días festivos aumenta el porcentaje de hogares en los que se habla con los otros miembros y se comparte la comida (56,4%) y en los que disfrutan de la comida (65,5%).

– El País Vasco destaca por ser la comunidad que más habla con el resto de miembros durante la comida, con un 68,6%.

– Canarias es la comunidad que más disfruta la comida con un 67,7%.

– En cambio, Castilla-La Mancha es la que más ve la televisión, escucha la radio o lee la prensa durante la comida, con un 67,7%.

“Siguen las profesiones para la mujer y para el hombre a pesar de la igualdad"

El Centro de Estudios, pionero en formación a distancia en España, CCC celebra su 70 aniversario. Con este motivo ha presentado un estudio en el que se analizan siete décadas de la sociedad española a través de la formación. Como testigo de este interesante periodo histórico, CCC ha ido adaptando su oferta formativa a las demandas e intereses de la sociedad y los estudiantes de cada época.

El Centro de Estudios, pionero en formación a distancia en España, CCC celebra su 70 aniversario. Con este motivo ha presentado un estudio en el que se analizan siete décadas de la sociedad española a través de la formación. Como testigo de este interesante periodo histórico, CCC ha ido adaptando su oferta formativa a las demandas e intereses de la sociedad y los estudiantes de cada época.

Esmeralda Mardomingo

P. Al terminar la guerra civil CCC inicia su actividad… háblenos de su historia.

R. Para hablar de la historia de CCC tengo que hablar de mi abuelo Juan Morera, que después de vivir en Francia, Bélgica e Inglaterra veintitantos años, llega a España y encuentra en San Sebastián la fábrica de discos Columbia, a la que propone la realización de cursos de idiomas con discos.

En ese momento Víctor Zabala estaba creando también en San Sebastián la Academia CCC, que quería decir Cursos de Comercio por Correspondencia, con cursos de contabilidad, cálculo mercantil, etc.

Inurrieta, el presidente de “Discos Columbia”, se une a Morera, con sus revolucionarios cursos de idiomas, y a Zabala en este proyecto que ahora cumple 70 años. Ahora, la Academia CCC se ha convertido en “Centro para la Cultura y el Conocimiento”.

 

P. Mantenerse 70 años en la educación a distancia confirma la premisa de que ¿todo lo que dura es bueno?

R. Pues yo creo que sí. Porque eso quiere decir que ha sido capaz de adaptarse al cambio y a las necesidades cambiantes de la sociedad. Y esto es lo que ha hecho CCC, ir adaptando su oferta formativa a cada momento y a las nuevas demandas profesionales.

La Coca Cola, sin embargo, sigue vigente con su sabor, su marca y su mágico envase… ese sí que es un fenómeno digno de estudio, porque más que un producto la Coca Cola es una emoción. CCC tiene que tocar la realidad que da de comer a las personas, por eso tenemos que ir cambiando, porque esas necesidades cambian.

 

P. Con motivo de este aniversario han publicado “Sociedad y Enseñanza en España 1939-2009”¿qué es lo más llamativo de este informe?

R. Lo que me ha sorprendido es la armonía entre la evolución de la España de los 40 hasta el siglo XXI con el encaje de los programas formativos de CCC. Estas cosas solo se ven así, cuando alguien traza una visión en la que el día a día se pierde. Probablemente ese estudio explica precisamente la adaptabilidad del modelo del centro.

 

P. Las necesidades de la gente van cambiando según evoluciona la propia sociedad, ¿detectarlas ha sido clave en el éxito de CCC?

R. Esto ha sido determinante. Sobre todo el ser capaz de detectarlas y pasar “de las musas al teatro”, o sea, convertirlas en ofertas educativas que atendían necesidades que la enseñanza tradicional o reglada no lo hacía.

 

P. De los discos fonográficos a las redes sociales y la web 2.0 ¿ la enseñanza a distancia no se entiende sin las nuevas tecnologías?

R. Yo creo que no… Aunque conviven todavía y supongo que por mucho tiempo los soportes tradicionales como el papel y los CDs… Porque precisamente en España la penetración de Internet en los hogares está muy por debajo de la media europea, escasamente supera el 50%, además mientras que el precio del ADSL no sea más accesible (porque somos los más caros de Europa) estas nuevas tecnologías no serán accesibles para todo el mundo. Y esa es una realidad a la que tenemos que enfrentarnos. De cualquier manera, el crecimiento que se produce en los alumnos que utilizan los servicios online de contacto con el profesor, crece enormemente día a día.

 

P. Los idiomas siempre han sido la gran baza de los cursos a distancia, ¿cuáles son ahora las joyas de la corona?

R. El Inglés con Mil Palabras y los cursos que preparan para acceder a títulos de Formación Profesional: por ejemplo, los sanitarios, el de mecánica, electricidad…

 

P. Pero con la crisis ¿no notan que se busca más la que da rápido acceso al mercado de trabajo?

R. Precisamente los cursos profesionales son los que tienen ahora más tirón.

 

P. ¿Cuántos cursos se han impartido en CCC y qué número de alumnos ha pasado por ellos? ¿cómo es el perfil del alumnado?

R. El total de profesiones que ha impartido CCC es de 274 y alrededor de 2 millones de alumnos han pasado por nuestras aulas llamémosles virtuales. Y además repartidos en más de 40 países. El perfil del alumnado ha ido cambiando. Antes era considerablemente más joven, entre 16 y 25 años y ahora la edad media va desde los 20 hasta los 40. La formación continua afecta más a nuestra sociedad actual.

 

P. En esta evolución histórica destaca el cambio de la situación de las mujeres ¿cómo han trasladado este cambio social?

R. Pues ahora las mujeres constituyen más del 50 por cierto del alumnado y aunque la mujer está presente en todas las profesiones siguen destacando algunas inevitablemente femeninas: auxiliar de jardín de infancia, geriatría, peluquería, esteticista… Y siguen existiendo profesiones “para la mujer y para el hombre”… a pesar de la igualdad.

 

P. El objetivo prioritario de su centro educativo es focalizarse en la atención al alumno ¿qué seguimiento hacen de sus estudiantes?

R. Precisamente ahora estamos desarrollando con intensidad un nuevo programa que denominamos en el equipo “Acompañamiento”. Esta palabra define lo que debemos lograr, intensificar nuestro esfuerzo para acompañar más y mejor a los alumnos a lo largo de su proyecto y de su objetivo formativo con nosotros.

 

P. ¿Cuáles son los principales problemas con los que debe “lidiar” la enseñanza a distancia?

R. El primero de todos es saber detectar las oportunidades. Y llamo oportunidades a aquellas áreas formativas que la gente necesita, y después encontrar a los “maestros” que pueden impartirlas y creando los programas en un corto espacio de tiempo después de haber comprobado que funciona.

 

P. Con la historia de CCC se puede apreciar que ¿la educación es el motor de cualquier sociedad?

R. Así como Einstein decía que la verdadera energía que mueve el mundo es la voluntad, la formación es lo que transforma no solamente a las personas sino a la sociedad. Pero la más importante de todas es la que se produce en el interior de uno mismo cuando adquiere una nueva preparación o conocimiento. Eso lo cambia todo.

 

El V Congreso de EducaRed reúne a 2.300 personas y aborda el apogeo de las redes sociales

Más de 2.300 personas pertenecientes a los diferentes colectivos implicados en la educación (profesores, asociaciones de padres y madres, sindicatos y organizaciones de directivos de centros escolares) han participado en las sesiones presenciales del V Congreso Internacional de EducaRed, celebrado en Madrid del 26 al 28 de noviembre e inaugurado por la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.

Todas las sesiones de este encuentro organizado por Fundación Telefónica han girado en torno a las Tecnologías de la Información y la Comunicación en la educación, destacando el debate entre Bernardo Hernández, director mundial de Marketing de Google, y Zaryn Dentzel, creador de Tuenti, sobre la expansión de las redes sociales interactivas, cómo afectan éstas a la educación y qué límites deben ponerse a su uso. Y es que en un momento de máximo apogeo de las redes sociales entre adolescentes y jóvenes que utilizan internet –una media de 20 horas semanales frente a otros modelos audiovisuales como la televisión– la Red debe servir de catalizador de información para educar. “Las redes sociales deben tener su continuidad en la educación”, aseguró Hernández. Por su parte, Dentzel afirmó que “no por utilizar más Tuenti se estudia menos, porque el problema es más profundo”.